¿Buscas ese ingrediente secreto que eleve tus postres de «ricos» a «absolutamente inolvidables»? ¿Un sabor que sorprenda, refresque y añada un toque de sofisticación digno de un chef de alta cocina? Permítenos presentarte al yuzu, un cítrico japonés con un aroma floral y un sabor complejo que es la respuesta a tus plegarias reposteras. Y la mejor forma de empezar a usarlo es con esta irresistible y versátil receta de crema de yuzu.

Esta crema, similar a un lemon curd pero con una personalidad mucho más exótica, es la clave para dar un toque gourmet a cualquier postre. Imagina una tarta de merengue con un relleno vibrante, un pastel con una capa sorpresa o simplemente una cucharada de esta delicia sobre unas galletas.

No te dejes intimidar por su nombre. Te prometemos un paso a paso tan sencillo que te preguntarás por qué no habías probado antes este tesoro de la cocina japonesa de postres.

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¿Qué es el Yuzu y por qué está conquistando al mundo?

Antes de empezar, conozcamos a nuestra estrella. El yuzu (Citrus junos) es un cítrico originario de Asia, principalmente de Japón, que físicamente parece un pequeño pomelo con una piel rugosa e irregular. Pero su verdadero superpoder reside en su sabor y aroma.

Imagina la acidez brillante de un limón, la complejidad floral de un pomelo y las notas dulces y fragantes de una mandarina, todo fusionado en una sola fruta. Es más aromático y menos agresivamente ácido que el limón, lo que lo hace increíblemente equilibrado. Su capacidad para cortar la riqueza de las grasas, añadir un toque de frescura y aportar una complejidad aromática inigualable lo ha convertido en un ingrediente de culto en la gastronomía de vanguardia, desde la repostería y la alta cocina hasta la coctelería.

Encontrar yuzu fresco puede ser un desafío fuera de Asia, pero por suerte, su zumo embotellado de alta calidad o su ralladura congelada están cada vez más disponibles en tiendas de productos asiáticos especializadas o en línea, haciendo que el uso del yuzu en repostería sea más accesible que nunca.

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Tu receta Kena: crema de Yuzu versátil (el curd japonés)

Esta preparación, técnicamente un curd, es la forma perfecta de capturar y disfrutar la esencia del yuzu. Su textura sedosa y su sabor intenso la convierten en un básico de lujo para tu refrigerador.

Ingredientes:

  • 3 huevos grandes, a temperatura ambiente

  • 150 g de azúcar blanca

  • 100 ml de zumo de yuzu (si usas yuzu fresco, necesitarás unos 3-4 frutos y su ralladura)

  • 100 g de mantequilla sin sal, fría y cortada en cubos pequeños

  • Una pizca de sal

 

Utensilios que te ayudarán:

  1. Un bol de vidrio o acero inoxidable resistente al calor.

  2. Una olla para hacer un baño maría.

  3. Un batidor de globo.

  4. Una espátula de silicona.

  5. Un colador de malla fina.

 

Preparación:

1. Prepara el baño maría (el secreto de la suavidad)

Este paso es fundamental para asegurar una cocción suave y evitar que los huevos se conviertan en un revuelto. Llena una olla con unos 3-4 centímetros de agua y llévala a un hervor muy suave. El bol que usarás para la mezcla debe poder encajar en la parte superior de la olla sin tocar el agua.

2. Mezcla los ingredientes base

En tu bol (fuera del fuego), usa el batidor de globo para mezclar enérgicamente los huevos y el azúcar hasta que la mezcla se vea pálida y ligeramente espumosa. Esto ayudará a disolver el azúcar. A continuación, incorpora el zumo de yuzu (y la ralladura, si estás usando fruta fresca) y la pizca de sal.

3. La cocción paciente

Coloca el bol sobre la olla con el agua hirviendo suavemente. Ahora, cambia el batidor por la espátula de silicona. Aquí empieza el secreto de la textura perfecta: remover constantemente. Raspa el fondo y los lados del bol sin parar para asegurar una cocción uniforme. La mezcla pasará de ser líquida a espesar gradualmente. Sabrás que está lista cuando cubra la parte posterior de la espátula y, al pasar el dedo, deje un surco limpio que no se vuelve a unir. Este proceso tomará entre 8 y 12 minutos. ¡Ten paciencia!

4. La Emulsión con mantequilla (el toque de brillo)

Una vez que la crema haya espesado, retira el bol del fuego inmediatamente para detener la cocción. Deja que se enfríe por un par de minutos. Ahora, comienza a añadir los cubos de mantequilla fría, uno por uno, batiendo vigorosamente con el batidor de globo después de cada adición. La mantequilla fría ayudará a enfriar la crema y a crear una emulsión perfecta, resultando en una textura increíblemente sedosa y un acabado brillante.

5. El enfriado correcto

Para una textura extrafina y profesional, pasa la crema a través de un colador de malla fina para eliminar cualquier posible grumo o la ralladura. Vierte la crema en un frasco de vidrio limpio y seco. Cubre la superficie directamente con plástico film (que el plástico toque la crema) para evitar que se forme una costra. Refrigera por al menos 3 o 4 horas, o idealmente toda la noche, hasta que esté completamente fría y firme.

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Ideas para usar tu crema de Yuzu y deslumbrar

Ahora que tienes tu «oro líquido», ¿qué hacer con él? Aquí tienes algunas ideas de postres con yuzu para inspirarte:

      • Tarta de Yuzu y merengue. La versión sofisticada del clásico pay de limón. Rellena una base de galleta o masa quebrada con tu crema de yuzu y cúbrela con un merengue italiano o suizo perfectamente flameado.

      • Relleno de macarons o profiteroles. Usa la crema como un relleno sorpresa y elegante. El contraste ácido y aromático es espectacular con la dulzura de estas preparaciones.

      • Parfait en vaso. Crea un postre elegante y fácil en capas. Alterna en un vaso una base de galletas trituradas, una capa generosa de crema de yuzu, una capa de yogur griego o queso mascarpone, y termina con frutas frescas como frambuesas o mango.

      • Sobre un cheesecake o Panna Cotta. Úsala como un topping vibrante para un cheesecake cremoso o una panna cotta de vainilla. El contraste es simplemente divino.

      • Acompañamiento simple. Sírvela junto a unas galletas de mantequilla, unos scones recién horneados o simplemente para acompañar un bol de frutas frescas.


¿En qué postre usarías esta receta de crema de yuzu? ¿En una tarta, en un pastel o simplemente a cucharadas? ¡Cuéntanos en los comentarios! ¿Cuál es el ingrediente poco común que más te gusta usar para sorprender en tus recetas?

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El toque secreto que lo cambia todo

La crema de yuzu es la prueba de que no necesitas técnicas complicadas para llevar tus postres a un nivel de alta cocina. Es un pequeño secreto que transformará tus creaciones y dejará a todos preguntándose cuál es tu ingrediente mágico.

Anímate a experimentar con este increíble cítrico. Descubrirás un mundo de sabor que es a la vez familiar y exótico, y que sin duda despertará tu creatividad en la cocina.

¿Qué otro ingrediente de la cocina asiática te gustaría que exploráramos en una próxima receta? ¡Déjanos tu sugerencia en los comentarios!

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