Tener un kit de maquillaje es importante porque nos permite ser más versátiles con nuestro aspecto. Con un kit básico podemos usar distintos productos para crear diferentes looks, desde un look sencillo y natural hasta uno más elaborado. Además, con un kit de maquillaje, podemos adaptar nuestro look a diferentes ocasiones, como una cita, una reunión de negocios y más.
Otro beneficio de tener un kit de maquillaje es que se puede usar en caso de emergencia. Por ejemplo, si se nos rompe un zapato y tenemos que ir a un evento formal, podemos usar nuestros productos para crear un look que nos ayude a sentirnos más seguras y presentables.
Kit de maquillaje. Foto cottonbro studio Pexels
¿Qué necesita tu primer kit de maquillaje?
Armar un kit de maquillaje para principiantes es emocionante. Aquí tienes una lista básica para comenzar:
- Base de maquillaje: Encuentra una que coincida con tu tono de piel.
- Corrector: Útil para cubrir imperfecciones y ojeras.
- Polvo compacto o suelto: Ayuda a fijar la base y reducir el brillo.
- Colorete o blush: Agrega color a tus mejillas.
- Sombra de ojos: Elige una paleta con colores neutros para empezar.
- Delineador de ojos: Puede ser líquido, lápiz o gel.
- Máscara de pestañas: Resalta tus pestañas. Es un básico, además, el enchinador viene en este apartado.
- Labial: Opta por tonos nude, un rojo que te haga sentir bien y un rosa. Con estos podrás jugar muy bien.
- Brochas y esponjas de maquillaje: Esenciales para aplicar los productos. Trata de tener al menos una para el blush, una para la base, otra para los polvos y brochas para los ojos, al menos unas cuatro de estas.
- Desmaquillante: Para retirar el maquillaje al final del día.
Consejitos varios:
Primero, es importante tomar en cuenta nuestra piel y nuestra rutina de maquillaje. Muchas veces se utiliza un primer para preparar la piel, pero tu rutina de cuidado será más que suficiente, ¡y es necesaria!
Es recomendable elegir productos que se adapten a nuestro tipo de piel y que sean fáciles de usar.
También es importante considerar los colores y los tonos que nos favorecen, y elegir productos que nos ayuden a resaltar nuestra belleza. Así que está bien que busques el nude que te haga brillar, así como el labial rojo; parece que todos son iguales pero de verdad, no es así.
Recuerda, la práctica es clave. Comienza con lo básico y experimenta a medida que ganes confianza.
Foto principal cottonbro studio Pexels
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