
Desde tiempos inmemoriales, los eclipses han sido considerados portales de inmenso poder y transformación. Estos espectáculos celestiales, donde el Sol o la Luna se oscurecen temporalmente, no solo capturan nuestra imaginación, sino que también marcan momentos de profundos cambios energéticos. En el mundo de la espiritualidad, se cree que esta intensa energía cósmica puede ser aprovechada para realizar una poderosa limpieza de nuestro campo energético personal, comúnmente conocido como el aura. Si alguna vez has sentido que cargas con un peso invisible, que la negatividad te rodea o que simplemente tu energía vital está baja, un eclipse podría ser la oportunidad perfecta para realizar un reinicio completo.
Querida amiga, te invito a aprovechar la energía de los eclipses y limpies tu aura con datos puntuales y eficases para sentir equilibrio y paz. La idea es que sueltes lo que no te deja avanzar y se lo entregues al Universo, para así poder recibir nueva y buena energía, indispensable para renovar tu bienestar y purificarte al 100.
¿Qué es el aura y por qué limpiarla en un eclipse?
El aura es un campo de energía sutil y luminoso que rodea a todos los seres vivos. Actúa como un escudo protector y un reflejo de nuestro estado físico, emocional, mental y espiritual. A lo largo del día, interactuamos con diversas personas y entornos, y nuestro campo energético puede absorber vibraciones densas o negativas, como el estrés, el miedo, la tristeza o la ira. Con el tiempo, esta acumulación puede generar bloqueos que se manifiestan como fatiga crónica, ansiedad, falta de claridad mental o una sensación general de malestar.
Los eclipses, ya sean solares o lunares, son catalizadores de cambio. Un eclipse solar, que ocurre en Luna Nueva, representa un final y un nuevo comienzo a gran escala; su poderosa energía de «reinicio» es ideal para eliminar viejos patrones y plantar semillas de intención. Un eclipse lunar, que ocurre en Luna Llena, es un portal de culminación y liberación emocional; su energía nos ayuda a sacar a la luz y soltar emociones reprimidas y cargas kármicas. Ambas son oportunidades magnificadas para una profunda purificación energética.
Preparándote para el ritual: crea tu espacio sagrado
Antes de que comience el eclipse, es fundamental preparar tanto tu entorno como tu mente. La intención es el ingrediente más importante en cualquier trabajo energético.
- Encuentra la calma. Busca un lugar tranquilo donde no te interrumpan durante al menos 30 a 60 minutos. Puede ser una habitación en tu casa, un rincón de tu jardín o cualquier espacio donde te sientas seguro y en paz.
- Limpia el espacio físico. Antes de limpiar tu propia energía, purifica el entorno. Puedes encender un sahumerio de salvia blanca, palo santo o copal, pasando el humo por todos los rincones de la habitación para neutralizar cualquier energía estancada.
- Reúne tus herramientas (opcional). Aunque no son indispensables, algunos elementos pueden potenciar tu ritual. Considera tener a mano:
- Velas. Una vela blanca simboliza la purificación y la claridad.
- Cristales. La selenita es excelente para la limpieza energética, el cuarzo transparente amplifica la intención y la turmalina negra protege de la negatividad.
- Sal. La sal marina o sal del Himalaya es un potente purificador. Puedes colocar pequeños recipientes con sal en las esquinas de tu espacio.
- Cuaderno y bolígrafo. Para escribir y luego liberar simbólicamente lo que deseas soltar.
Técnicas efectivas para limpiar tu aura durante el eclipse
Una vez que tu espacio esté listo, puedes comenzar tu ritual personal. Elige una o varias de las siguientes técnicas, guiándote por tu intuición.
1. Meditación de visualización y corte de lazos
Esta es una de las prácticas más poderosas. Siéntate o acuéstate cómodamente, cierra los ojos y concéntrate en tu respiración.
- Visualiza tu aura. Imagina tu campo energético como una burbuja de luz que te rodea. Observa si tiene áreas oscuras, opacas o «sucias». No juzgues, solo observa.
- Invoca una luz purificadora. Visualiza un potente rayo de luz blanca o dorada descendiendo desde el cosmos, directamente desde el eclipse, y entrando por tu coronilla. Siente cómo esta luz inunda todo tu ser y se expande hacia tu aura.
- Limpia y libera. Imagina que esta luz actúa como una cascada o un imán, disolviendo y arrastrando toda la energía densa, los miedos y las preocupaciones. Visualiza cómo esta negatividad se desprende de tu aura y se disuelve inofensivamente en la tierra.
- Corta lazos energéticos. Piensa en personas, situaciones o hábitos que te drenan energía. Visualiza los cordones o lazos que te unen a ellos y, con una exhalación fuerte, imagina que los cortas con una espada de luz, liberándote de su influencia.
2. El ritual de la escritura y la liberación
El acto de escribir tiene un gran poder para materializar nuestros pensamientos y emociones.
- Escribe lo que quieres soltar. En una hoja de papel, escribe todo aquello de lo que deseas liberarte: miedos, resentimientos, hábitos tóxicos, relaciones pasadas, dudas, etc. Sé completamente honesto.
- Quema el papel (con seguridad). Durante el punto máximo del eclipse, quema ese papel en un recipiente a prueba de fuego. Mientras el papel se consume, visualiza que todas esas cargas energéticas se transforman en humo y se disuelven en el universo. Agradece la lección aprendida y la liberación.
3. Baño de sal purificador
El agua y la sal son elementos de limpieza ancestrales. Un baño ritual durante la noche del eclipse puede ser profundamente sanador.
- Prepara el baño. Llena la bañera con agua tibia y añade un buen puñado de sal marina, sal de Epsom o sal del Himalaya. Puedes agregar también unas gotas de aceites esenciales como lavanda (para la calma) o romero (para la protección).
- Sumérgete con intención. Mientras te sumerges, establece la intención de que el agua y la sal absorban toda la negatividad de tu cuerpo físico y de tu aura. Permanece en el agua al menos 20 minutos, visualizando cómo la energía densa te abandona. Al salir, deja que el agua se vaya por el desagüe, imaginando que todo lo negativo se va con ella.
Después del eclipse: sellando tu aura y manteniendo la vibración alta
Una vez que has realizado tu limpieza, es crucial sellar tu aura para mantener esa nueva energía vibrante.
- Sella con luz. Después de tu meditación o ritual, visualiza nuevamente tu aura, ahora limpia, brillante y vibrante. Imagina que la recubres con una capa final de luz dorada o blanca, como un escudo protector.
- Establece intenciones positivas. En una nueva hoja de papel, escribe cómo quieres sentirte y qué energías quieres atraer a tu vida. Coloca este papel en tu altar, bajo tu almohada o en un lugar visible.
- Mantén la frecuencia. En los días posteriores al eclipse, sé consciente de tus pensamientos, de la música que escuchas y de las personas con las que te rodeas. Hidrátate bien, pasa tiempo en la naturaleza y practica la gratitud para mantener tu vibración alta.
Aprovechar la energía de un eclipse para limpiar el aura es un acto de profundo amor propio y empoderamiento. Es recordar que, así como los cuerpos celestes se alinean y renuevan, nosotros también tenemos la capacidad de alinearnos con nuestra esencia más pura y luminosa.
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