El Dr. John Gottman, considerado experto internacional en relaciones humanas y fundador del Instituto Gottman, ha ganado su fama mundial porque con sólo observar a una pareja (homosexual, heterosexual, rica o pobre, con hijos o sin hijos, etcétera) interactuar durante 3 minutos, puede predecir con 94% de precisión si esa pareja va a durar mucho tiempo casada y feliz; si seguirá casada pero infeliz, o si se divorciará pronto. Esto debido a que puede identificar hábitos nocivos en las relaciones.

Aunque la mayor parte de los descubrimientos de Gottman tienen que ver con las relaciones de pareja, sus descubrimientos son tan prácticos y tienen tanto que ver con nuestra naturaleza humana, que pueden ser utilizados en cualquier relación de nuestras vidas, ya sea familia, trabajo o amistades.

Para poder entender cuáles son los elementos de las relaciones sanas y duraderas, durante las últimas cuatro décadas el Dr. Gottman formalizó sus observaciones en un ambiente de laboratorio. Al estudiar a miles de parejas, se dio cuenta que podían clasificarse en dos grupos importantes:

  • Los desastres del amor. Que son las parejas que acabarán separándose o que permanecerán juntas, pero serán crónicamente infelices.
  • Los maestros del amor.  Que son las parejas que continuarán felizmente casadas, por lo menos en los siguientes 6 años.

Los desastres del amor y hábitos nocivos en las relaciones

En sus observaciones descubrió que una de las características de los “desastres del amor” es que sistemáticamente desarrollaban una serie de malos hábitos conocidos como “los 4 jinetes del Apocalipsis de las relaciones”. Estos hábitos se componen de diferentes comportamientos (algunos sutiles otros no tanto), que cuando se vuelven un patrón seguramente llevarán al deterioro de la relación.

Veamos de qué se tratan estos “4 jinetes”:

1. La crítica constante. Es el ataque frecuente a la personalidad o el carácter de tu pareja o de su manera de hacer las cosas. Usualmente se utiliza para enfatizar que uno está bien y la otra persona no. Cuando nos critican nos sentimos agredidos, poco apreciados y vamos cultivando el resentimiento contra la pareja.

Así se escucharía el jinete de la crítica: “Siempre es lo mismo contigo, te tengo que pedir las cosas tres veces. Te he pedido que dejes tu ropa sucia en el cesto, pero eres un egoísta…”

Un maestro del amor se escucharía: “¿Podrías por favor intentar poner la ropa en el cesto? ¿Qué te ayudaría? ¿Qué haría falta? Podemos mover el cesto más cerca, junto al baño o al vestidor”.

2. La actitud defensiva. Esto implica que no escuchamos para construir, sino que escuchamos para responder o contraatacar. Generalmente este “jinete” se manifiesta con una conducta reactiva.

Así se escucharía el jinete de la actitud defensiva: “Yo te levanto la voz porque tú también me hablas feo y me haces caras…”.

Un maestro del amor se escucharía: “Está bien, me disculpo si te alcé la voz, no me di cuenta; voy a intentar ya no hacerlo. Pero me gustaría que tú también por favor consideraras…”.

3.- El desprecio, entre los hábitos nocivos en las relaciones. Sin duda el más dañino de todos, porque es un ataque que tiene por intención dañar y denigrar psicológicamente al otro. De hecho, es el factor principal que hace que las parejas se separen. El desprecio no sólo se manifiesta con palabras, sino que también involucra algunos gestos despectivos de lenguaje corporal, como el girar los ojos, reírse sarcásticamente, hacer muecas o torcer la boca.

Así se escucharía el jinete del desprecio: “Hay que repetirte las cosas diez veces. Para haber ido a la universidad tu capacidad de aprendizaje es realmente lenta…”

Un maestro del amor se escucharía: “Dame un minuto, necesito calmarme…” y acto seguido, tomarse el tiempo de pensar bien cómo abordar la situación de una manera constructiva, sin sarcasmos e ironías que hieran.

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Los 4 jinetes del apocalipsis en el amor. Foto Freepik

Los 4 jinetes del apocalipsis en el amor. Foto Freepik

4. La pared de piedra. Los niños pequeños le llaman la “ley del hielo” y los adultos la aplican cuando quieren evadir a la otra persona, optando por quedarse en silencio o literalmente ignorar al otro. Pero ignorar ya es un tipo de agresión.

Hay que recordar que, en el violentómetro del Instituto de Derechos Humanos, el ignorar a otra persona clasifica como el primer nivel de violencia.

Además de ignorar a la otra persona, el jinete de la pared de piedra también aplica otros comportamientos, como no ver a la persona a los ojos, cambiar el tema si está hablando de algo que le importa, salir físicamente de la habitación, o responder con monosílabos.

Estos comportamientos hacen sentir al otro menospreciado y pueden generar ira y resentimiento difíciles de superar. Por eso, los maestros del amor comunican abiertamente que están enojados y que no es un buen momento para continuar hablando. Que necesitan un break. Es importante no olvidar que la palabra dicha no se recupera y que nada justifica lastimar a los demás.

Los 4 jinetes del Apocalipsis no son exclusivos de los “desastres del amor” pueden aparecer en todo tipo de relaciones y en cualquier momento. Son como pequeños tumores malignos, que vuelven tóxica una relación. Por tal razón hay que poner mucha atención en nuestras interacciones y asegurarnos de que en ellas abunden la conexión, la generosidad y la gentileza. Estas tres son las características que Gottman identificó como los pilares de las relaciones positivas y edificantes.

Si quieres aprender cómo lograr una felicidad activa y positiva, te invito a seguirme en mis redes sociales y a leer mi libro Felicidad activa.



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