Los lunares son crecimientos pigmentados en la piel causados por la acumulación de células productoras de pigmento llamadas melanocitos. Su aparición se debe a factores genéticos y a la exposición al sol.
¿Quiénes están más propensas a desarrollar lunares en la piel ?
Las personas con piel clara son generalmente más propensas a producirlos, ya que tienen menos melanina para proteger la piel de los daños causados por la exposición al sol. Además, la predisposición genética y la exposición constante sin protección son factores que también influyen en la formación de lunares.
Tipos existentes de lunares
- De nacimiento (nevus congénitos). Presentes al nacer.
- De jardín (nevus displásicos). Pueden ser más grandes y tener bordes irregulares.
- De unión (nevus de unión). Dos o más lunares cercanos que parecen fusionarse.
- De sangre (hemangiomas). Crecimientos de vasos sanguíneos en la piel.
- Elevados (nevus elevados). Sobresalen de la piel.
- Planos (nevus planos). Están nivelados con la superficie de la piel.
¿Qué debes hacer al momento de su aparición?
- Observación regular. Vigila cualquier cambio en tamaño, forma o color.
- Protección solar. Usa protector solar para prevenir daños por exposición al sol.
- Evita rascarte. No los rasques ni los manipules para evitar irritación.
- Auto vigilancia. Realiza autoexámenes de la piel para detectar cambios.
- Consulta médica. Si notas cambios sospechosos, como sangrado, picazón o irregularidades, consulta a un dermatólogo.
- Historial familiar. Conoce el historial familiar de lunares y cáncer de piel.
¿Tienes algunos?, identifícalos con los nombres.
Foto principal: hogarmania, Pinterest
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