Más allá de ser un ingrediente económico y versátil en la cocina, las patas de pollo ofrecen un sinfín de beneficios para la salud. A continuación, te presentamos algunos de los motivos principales por los que incluirlas en tu dieta.
5 beneficios de las patas de pollo
1. Ricas en colágeno. En primer lugar, son una de las mejores fuentes naturales de colágeno, una proteína esencial para la salud de la piel, articulaciones, huesos y cartílagos. El colágeno ayuda a mantener la piel firme y elástica, reduce las arrugas, fortalece los huesos y las articulaciones, y previene la artritis.
2. Fortalecen el sistema inmunológico. Son ricas en glucosamina y condroitina, dos compuestos que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y combatir enfermedades como la artritis, la osteoporosis y la tendinitis.
3. Contienen vitaminas y minerales esenciales. Son una buena fuente de vitaminas B, como la B6 y la B12, que son importantes para el metabolismo energético y la función del sistema nervioso. También contienen minerales como el calcio, fósforo, magnesio y zinc, que son esenciales para la salud de los huesos, dientes y músculos.
Una sopa de patas de pollo lo es todo. Foto Unplash
4. Son bajas en calorías y grasas. Son una opción saludable para aquellos que buscan perder peso o controlar su ingesta de calorías. Son bajas en calorías y grasas, y altas en proteínas y nutrientes.
5. Versátiles en la cocina. Finalmente, se pueden preparar de diversas maneras, desde caldos y sopas hasta guisos, frituras y ensaladas. Son un ingrediente económico y versátil que puede agregar sabor y textura a tus platos.
¡Anímate a incluirlas en tu dieta y descubre sus sorprendentes beneficios para la salud! Puedes prepararlas en sopas, en salsa o en la freidora de aire.
Foto principal: Unplash
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