Llega el fin de año y todas estamos corriendo con las uvas, la maleta y el calzón amarillo. Pero, ¿sabías que a veces alejamos la fortuna por puro desconocimiento? En esta guía te contamos qué no hacer el 31 de diciembre si quieres que el próximo año sea espectacular. ¡Toma nota y no metas la pata! Estos son los rituales de año nuevo que debes cumplir sí o sí.

Rituales de año nuevo

Rituales de año nuevo

No seas tu propia piedra en el zapato: 10 cosas prohibidas este 31 de diciembre

1. El peligro de las tijeras y el cambio de look

Uno de los grandes errores es querer recibir el año con un look radical decidido a última hora. Sin embargo, la tradición dice que no debes cortarte el cabello ni rasurarte ese día. Se cree que al «cortar» algo de tu cuerpo, estás cortando el flujo de energía y la longevidad de tus proyectos.

El año pasado mi prima decidió hacerse una cambio de look a las 6 de la tarde del mismo 31. Aparte de quedar trasquilada por el corre corre del día (y esto fue fatal), ella comenta que sintió que su energñia estuvo «mochada! durante todo el mes de enero. O vas antes del 31 de diciembre o mejor esperas al 2 de enero.

Que no hacer el 31 de diciembre

Que no hacer el 31 de diciembre

2. Cuelga la escoba y olvida el detergente

Existe la creencia de que limpiar la casa el mismo 31 es como «barrer la suerte» que ya entró. La limpieza profunda debe hacerse el 29 o el 30. Si barres hacia afuera a medianoche, podrías estar sacando la prosperidad antes de que se asiente.

3. Nada de negro en la cena de gala

Aunque el negro es elegante y nos hace ver divinas, en año nuevo simboliza la ausencia de luz o el luto por el ciclo que se va. Lo ideal es usar colores vibrantes o el clásico blanco para atraer pureza y nuevas oportunidades.

Realmente la tentanción del look total black es inevitable, aparte de elegante es seguro bajo todo pronóstico, pero el 31 de diciembre no es el día para lucir un look así. Este año yo decidí por vestirme de amarillo mostaza y marrón, colores alegres que atraen prosperidad. ¿Y tú, de qué color te quieres vestir?

4. Las deudas y la cartera vacía

Otra cosa que no debes hacer el 31 de diciembre es pasar la medianoche sin un billete en el bolsillo o debiendo dinero a tus amigas. La energía del dinero es cíclica; si empiezas el año «debiendo», el universo entenderá que ese es tu estado natural.

5. Lavar la ropa es un gran no

En muchas culturas, lavar ropa el último día del año simboliza «lavar a un miembro de la familia», una superstición fuerte relacionada con la salud. Además, ¿quién quiere pasar el último día del año lidiando con ropa húmeda? ¡Deja que el cesto espere!

Agüeros de fin de año

Agüeros de fin de año

6. No llores ni te quejes

El estado de ánimo con el que recibes el 1 de enero marca la pauta de los siguientes 365 días. Evita las discusiones familiares o llorar por el ex. Si te enfocas en la carencia, eso es lo que atraerás.

Estás fechas son nostalgicas al mil, pero es necesario aguantar esa lloradita para después. Si despides e inicias un nuevo año llorando, lo que sigue será igual, 365 días lleno de tristezas, nostalgia y lagrimas. Stop a los dramas sentimentales, coloca música alegre y disfruta este cierre de ciclo.

7. Evita los platos de aves (pollo o pavo)

Aunque es común, algunos expertos en rituales sugieren no comer aves que «rasquen» la tierra hacia atrás para buscar comida (como el pollo), porque podrías pasar el año «rascando» para sobrevivir. Mejor opta por cerdo o pescado, que simbolizan avance y abundancia.

8. No dejes las ventanas cerradas

A medianoche, es vital abrir al menos una ventana. Debes dejar que el año viejo salga y el nuevo entre. Si mantienes todo sellado, la energía se estanca y el aire se siente pesado desde el primer minuto del año.

9. Cuidado con los préstamos

No prestes dinero el 31. Si lo haces, estás decretando que tu capital saldrá de tus manos durante todo el año entrante. Es mejor ser generosa en otros momentos, pero ese día, protege tu flujo financiero.

10. No dejes la despensa vacía

Asegúrate de tener arroz, lentejas o pan en tu cocina. Una alacena vacía el último día del año es un imán para la escasez. Incluso si vas a cenar fuera, deja un frasco lleno de granos en tu mesa. Por lo tanto, haz mercado días previos al 31, y manten tu casa surtida de alimentos.

Mi recomendación final: enciende inciensos de palo santo, canela, coco o mirra. Esto terminará de sellar esa atracción espirutual y energética que buscas. Los ricos olores son necesarios para mentener el ambiente fresco y en armonía.

Ahora que ya sabes qué no hacer el 31 de diciembre, relájate y disfruta. Lo más importante es la intención que le pongas a cada acción. ¡Que este año nuevo te traiga todo lo que sueñas y más!

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Feliz 1 de enero con buena suerte. Pinterest

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