Seguramente cuando piensas en tener sexo, lo primero que desean tú y tu pareja es correr a la cama y esto no tiene nada de malo, pero si deseas convertir tus encuentros amorosos en algo más arriesgado y placentero, dale un descanso al colchón y prueba nuevos lugares y posiciones sexuales. ¿Te atreves?
Algunos especialistas afirman que tener sexo en lugares distintos e inesperados, libera más hormonas del cerebro y esto aumenta la pasión y el deseo.
Les recomiendo que desde hoy trasladen esos momentos de acción fuera de la habitación, esto puede ser en otro sitio de la casa, no necesariamente tienen que salir de su hogar. Toma nota de estas sugerencias:
Cocinemos sexo…
Así es, la cocina puede ser el escenario perfecto no sólo para encender la estufa, ¡también la pasión! Siéntate en el borde del desayunador o si eres muy hábil, en la lavadora y levanta las rodillas hasta el pecho. Tu pareja debe de quedar frente a ti de pie entre tus piernas para penetrarte. Pídele a tu chico que te tome del trasero y así puedas moverte con mayor facilidad. Los resultados, serán como un platillo que acabas de cocinar, simplemente delicioso.
También recuerden que tienen el refrigerador cerca y si encuentras una crema batida puedes llenar a tu pareja y lamer para quitársela.
Abre las puertas del sexo
Tener sexo de pie no es cosa fácil, pero las puertas de tu hogar te pueden ayudar, pídele a él que se apoye en el umbral de una puerta de cuclillas, con la espalda contra un lado del marco, sus muslos paralelos al piso y sus manos debajo de la parte baja de su espalda como sostén. De espaldas a él, abre las piernas para que su piernas queden en el interior de las tuya.
En esta posición inclínate hacia adelante y empuja el marco opuesto con las palmas de tu mano, esto te ayudará a equilibrarte y variar tus movimientos. Los dos disfrutarán exquisitas sensaciones.
Burbujas de amor
Para quien no ha experimentado tener sexo en el baño, tiene que probarlo al menos alguna vez porque el simple hecho de meterte a bañar con tu pareja y enjabonarse mutuamente es algo sumamente excitante. Si cuentan con una tina pídela que se tienda boca arriba y descanse la cabeza en el borde la tina, de frente a él arrodíllate sobre una de sus piernas y baja tu cuerpo hasta él. Pídele que te penetre y cuando lo haga enrédate en él y comienza a moverte, ambos gozarán al máximo.
Frente a frente
Parados, coloca la espalda contra la pared y que él se pare enfrente tratando de estar al mismo nivel. Levanta una pierna y sujétate de sus hombros mientras te penetra, el placer que sentirán ambos al hacerlo de esta manera será infinito.
Como acabas de leer, no te tienes por qué conformar con la cama si puedes tener sexo en lugares distintos con más intensidad.
¿Te animas a experimentarlo?
¡Mucha suerte!
Ahora lee: cómo tener un matrimonio con mucho sexo.
Síguenos en redes sociales como @KENArevista: