Al elegir un tinte busca el que te permita teñir sin dañar tu cabello. Recuerda que los excesos de tratamientos cosméticos:

  • Maltratan las fibras capilares.
  • Estropean el aspecto de tu melena.
  • La hacen ver reseca, opaca y sin vida.

Recuerda, cualquier proceso químico que hagas te va a maltratar las hebras, la clave está en escoger el que menos daño te cause.

Toma nota de estas ideas, para que varíes el color de tu melena de manera natural, con lo que no la perjudicarás demasiado.

Lavarlo o no, para evitar dañar tu cabello

Los aceites naturales protegen el cuero cabelludo de alergias o irritaciones al teñirlo; pero también, si está muy sucio, repelen el color del tinte.

Para un mejor resultado, lo ideal es lavarlo un día antes, solo con champú. Evita utilizar acondicionadores, productos para el cuidado del cabello, o geles que pueden incidir en la variación del color.

Evita cambios drásticos para no dañar tu cabello

Si estás pensando cambiar de negro a rubio platinado, lo mejor es que vayas desistiendo de la idea, porque una decoloración total daña la estructura del cabello.

Lo recomendable es decolorarlo por volúmenes y hacer un descanso de 15 días entre cada aplicación, para no quemarlo.

También puedes probar a hacerte reflejos o mechas, que vayan degradando lentamente el tono.

Rojo radiante

Para obtener este tono necesitas:

  • 2 tazas de agua.
  • 3 cucharadas de pétalos de flor de cayena.
  • 1/2 taza de pétalos de caléndula o margaritas.

Hierve agua a fuego lento y pon los pétalos a calentar durante media hora. Retira del fuego y enfría en el refrigerador.

Lava tu cabello como lo haces de costumbre, y por último enjuaga con esta preparación. Seca el cabello bajo el sol, y verás cómo va cambiando de color.

Castaño oscuro o negro

Si deseas oscurecerlo, coloca en medio litro de agua una taza de café bien fuerte. Ponlo a hervir por 15 minutos, y deja que se enfríe durante unos 10 minutos.

Remoja tu cabello durante media hora en esta infusión y, por último, lávalo como lo haces normalmente.

Castaño claro

Para teñirlo de este tono, bastarán:

  • 3 tazas de agua.
  • 1/2 de taza de hojas de romero.
  • ¼ de taza de hojas de ortiga.
  • 1/2 de taza de hojas de salvia.

Hierve a fuego lento durante 25 minutos, y cuela todo para separar las hojitas. Vacía esta agua en una botella para spray que ya no utilices, y guárdalo en el refrigerador.

Una hora antes de que te metas a bañar, rocía un poco por toda tu melena, y repite el procedimiento cuando te estés bañando, para que funcione como el último enjuague.

Rubio

Para este espectacular tono, debes hervir dos tazas de agua con una taza de flores de manzanilla. Exprime un limón completo y retira después de 25 minutos.

Utiliza esta mezcla como enjuague cada vez que laves tu cabello, sécalo un poco y sal al sol durante 10 minutos, para que aclare más rápido.

 ¿Producto natural y sin químicos?

La henna es tu mejor opción. Son polvos que se suelen usar para hacer tatuajes temporales en la piel, y también se usan para colorear el cabello y darle una tonalidad más rojiza o más clara.

La ventaja principal de teñirse el pelo con henna es que no lo dañas, y le aportas nutrientes y vitaminas que son muy favorables para el cuero cabelludo.


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