Vivimos en una época donde debe prevalecer el cuidado del medio ambiente. Y hoy conoceremos cómo combinarlo con tu rutina de belleza.

 Para nadie es un secreto que el medio ambiente es el más afectado por el mal empleo de los desechos, la poca cultura de reciclaje y especialmente por el indebido uso del plástico, entre muchos otros factores.

Es por eso que las empresas de la industria cosmética, una de las principales que emplean de forma poco adecuada el plástico, procura incorporar prácticas más respetuosas con los océanos, como buscar alternativas vegetales a los componentes marinos de origen animal que utilizan en sus productos o prohibir ciertos compuestos químicos en la formulación de los mismos.

Para lograr la eficacia de un producto de cosmética azul es sumamente importante que el mismo no contenga componentes tóxicos en su fórmula ni genere ningún tipo de residuos

Ecológica vs. azul

Debemos aprender a diferenciar estos dos tipos de cosmética.

  1. Ecológica. Ya existe desde hace algún tiempo y está ideada para proteger al medio ambiente.
  2. Cosmética azul. Se refiere a las prácticas de la industria cosmética que son perjudiciales para los ecosistemas marinos.

Belleza + biodiversidad: Tarea de todas

A pesar de que el océano tiene una capacidad de regeneración relativamente rápida, el ser humano también tiene una capacidad de contaminación potente. Sin embargo, está en las manos de todos lograr el cambio que tanto se anhela para nuestro planeta.

Lo más recomendable es leer las etiquetas y empaques para adquirir, en la medida de lo posible, aquellos productos ecofriendly. De este modo podrá cambiarse la industria para cuidar al medio ambiente.

Belleza + biodiversidad, ¡tarea de todas! Foto Freepik

Belleza + biodiversidad, ¡tarea de todas! Foto Freepik

Revolución cosmética

El buen marketing y las múltiples campañas de concienciación han sido fundamentales en el desarrollo de la cosmética azul y el impacto que la industria cosmetológica puede llegar a tener sobre el medioambiente. Esto ha traído como consecuencia el aumento de la demanda de componentes ecológicos entre aquellas marcas que se preocupan por la sostenibilidad de sus productos.

 

Tiempo de cambiar

Según Melissa Hago, consultora en pronósticos de mercado y vicepresidenta responsable de cosmética de Fashion Snoop: “El concepto de cosmética ecológica nace de un cambio consciente hacia la sostenibilidad en nuestro estilo de vida: comer sano, reciclar y evitar ciertos compuestos químicos”.

Las empresas iniciaron hace dos años esta tendencia y han perfeccionado sus productos para lograr ofrecer una mejor calidad de vida y una mayor protección al océano.

5 acciones de rescate para la belleza

Son muchas las actividades que, de manera individual, podemos llevar a cabo para ayudar a la limpieza de los mares del mundo.

  1. Disminuir el consumo de energía eléctrica. Una manera de hacerlo es tener bombillos ahorradores y desenchufar los artefactos eléctricos cuando no los estemos usando.
  2. Consumo responsable. Evitar comer especies de pescados y mariscos que se encuentren en peligro de extinción. Educarnos más sobre esta materia es la clave.
  3. Usar menos plástico. Acostúmbrate a llevar tu bolsa reciclable a todos lados y evita usar las de papel. Consume más de envases de vidrio que de plástico.
  4. Limpiar. No solamente se debe prevenir ensuciar cerca del mar. Una buena acción para el planeta también lo es apoyar las campañas de limpieza a orillas de las playas.
  5. Evita muertes. No compres productos elaborados con conchas marinas, que provengan de arrecifes, tiburones o ballenas.

“Cada año, alrededor de ocho millones de toneladas de plástico se acumulan en los océanos, lo que asciende en la actualidad a un total de 150 millones de toneladas de plástico en el fondo del mar”. Sarah Jay, creadora del documental “Toxic Beauty”.



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