El botox capilar es un tratamiento para el cabello que utiliza ingredientes como colágeno, queratina y proteínas para reparar y rejuvenecer el cabello. Aunque se llama «botox», no contiene la toxina botulínica utilizada en procedimientos cosméticos. En lugar de eso, busca mejorar la apariencia del cabello, proporcionando hidratación, reduciendo el frizz y restaurando la elasticidad.

Puede beneficiar a diferentes tipos de cabello, especialmente aquellos que están dañados, secos, con frizz o que han sido sometidos a tratamientos químicos. Es útil para cabellos que han perdido su brillo, elasticidad y suavidad debido a factores como la exposición al sol, el uso frecuente de herramientas térmicas, tintes o alisados químicos.

Sin embargo, es importante ajustar el tratamiento según las necesidades específicas del cabello, ya que no todos los tipos de cabello requieren la misma intensidad de cuidado.

Botox capilar.  Foto cottonbro studio Pexels

Botox capilar. Foto cottonbro studio Pexels

¿Cómo aplicar el botox capilar? 

La aplicación del botox capilar puede variar según la marca y el producto específico, pero generalmente sigue estos pasos básicos:

  1. Lava el cabello con un shampoo suave para eliminar impurezas y abrir las cutículas del cabello.
  2. Seca el cabello con una toalla para quitar el exceso de agua, dejándolo ligeramente húmedo.
  3. Divide el cabello en secciones y aplícalo de manera uniforme, asegurándote de cubrir cada hebra. Utiliza un peine para distribuir el producto de manera uniforme.
  4. Deja que el producto actúe durante el tiempo recomendado en las instrucciones del producto. Este tiempo suele ser de 20 a 45 minutos.
  5. Enjuaga cuidadosamente el cabello para eliminar el exceso de producto. Algunos productos pueden requerir un acondicionador específico que se aplica después del enjuague.
  6. Seca y estiliza el cabello según tus preferencias. Algunos productos requieren el uso de herramientas térmicas para sellar el tratamiento.

Es crucial seguir las instrucciones del producto que estás utilizando, ya que las formulaciones pueden variar.

Siempre es recomendable realizar una prueba de parche antes de aplicar cualquier tratamiento para asegurarte de que no haya reacciones alérgicas. Además, si no estás seguro de cómo aplicarlo, considera buscar la ayuda de un profesional en un salón de belleza.

Foto principal RDNE Stock project Pexels 


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