Vivir acelerada, tener una dieta desequilibrada y someterse a mucho estrés trae como consecuencia el incremento de riesgo cardiovascular y con él, la posibilidad de un infarto.

Llevar un estilo de vida sano, hacer ejercicios, consumir frutas y verduras frescas, reducir el consumo de cafeína y cigarrillos, son solo algunos de los consejos que debemos seguir para evitar la tan temida arteriosclerosis, una obstrucción arterial coronaria, un accidente vascular cerebral o, en el peor de los casos, un infarto.

¿Qué produce el infarto?

Malos hábitos, como el consumo excesivo de grasas, la comida chatarra, el tabaquismo, el sedentarismo, el estrés, el alcohol o las drogas.

Todos los factores antes mencionados producen un bloqueo de las arterias coronarias, que son las que suministran la sangre a los músculos cardíacos.

Síntomas previos a un infarto

  • Dolor en el pecho.
  • Molestia aguda en la parte superior del cuerpo, en el cuello, la espalda, la mandíbula y los brazos.
  • Falta de aire, lo cual hace que la persona trate de respirar tomándolo en bocanadas.
  • Cansancio y aturdimiento inexplicable o repentino.
  • Náuseas, vómitos y sudor frío (más en mujeres que en hombres).

Estos síntomas aparecen y desaparecen, por lo que en la mayoría de los casos se ignora que un infarto está por suceder.

No tomes a la ligera un dolor en el pecho. Foto: azerbaijan_stockers en Freepik

¿Con qué síntomas se puede confundir?

• El dolor en el pecho se puede confundir a menudo con estrés.
• La molestia se irradia a diferentes partes del cuerpo, lo que hace difícil su diagnóstico. Un dolor en el cuello o en la espalda no son tomadas en cuenta como síntomas de un infarto.
• Las náuseas y los vómitos en las mujeres por consiguiente, se relacionan con embarazo.
• Ahogos, debilidad, fatiga y sensación de indigestión, suelen presentarse también en mujeres en fase de postmenopausia.

¿Cómo actuar en caso de un infarto?

• Mantener la calma, para tomar decisiones acertadas. Asimismo, tratar de reconocer los síntomas y pensar en qué se puede hacer.
• Poner al paciente en una postura que lo haga sentir mejor y donde pueda respirar con menor esfuerzo.
• Finalmente, buscar a un profesional de inmediato, o llamar a un paramédico que pueda guiar en la atención del afectado desde los primeros síntomas, hasta que llegue el médico tratante, para así reducir el tiempo de espera.

https://kena.com/gas-en-el-pecho-o-infarto-aprende-a-diferenciarlos/

Foto principal: 8photo en Freepik


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