Hoy es cumpleaños de una mujer que ha tenido una trayectoria grande… es la mujer que elegí como madre y de quién he aprendido ¡taanto!
Por supuesto que a sus ochenta años que cuenta hoy, ha pasado por muy diversos momentos en los que ha aprendido tanto de la vida y de ella misma: como hija, como hermana mayor, como esposa, como madre, como empresaria, pero sobre todo como mujer, porque todo esto lo ha desarrollado desde la experiencia de ser mujer.
Con enseñanzas intrínsecas de lo que es ser mujer en nuestro país y en medio siglo XX y otro buen cacho del XXI, ella llega al año 2021 a hacer el recuento de los años con un saldo bastante positivo.
Yo estoy segura que cuando se las estaba rifando con sus tres chiquillos en Mérida Yucatán, con un calor infernal, intentando vivir como mejor podía en una ciudad muy lejana a su familia y a los suyos, tratando de sortear los conflictos que cualquier familia, y/o pareja tiene que sortear, en condiciones que quizás no se imaginaba, no le pasaba por la mente qué estaría haciendo en el siglo XXI, “¿iré a llegar?», y mucho menos “¿cómo voy a festejar mis 80 años?”, “¿llegaré a 80 años?”
Recordando historias
Al paso de los días, de los meses, de los años… todas y todos alcanzamos un punto en el que puedes hacer un recuento y saber que hay una bella historia por contar. Esa historia que en este caso, traemos de la memoria en muchos momentos de la vida, no solo lo que ella recuerda y lo que platica, también lo que yo recuerdo, lo que yo platico, las experiencias que hemos vivido juntas o las que nos hemos detonado la una a la otra. Hay momentos muy difíciles que le hice pasar como una hija adolescente muy rebelde, y en esos tiempos una mamá distante que sentía que no me escuchaba ni me comprendía. Pero como todo… eso también pasó y más tarde ella se dio la oportunidad de vivir una vida laboral en donde desarrolló negocios interesantes y en donde se la rifó y se expandió como empresaria logrando llevar 3 diferentes negocios al éxito, regalándome un ejemplo que me ayudó a labrar mi propia independencia.
Ella es una apasionada viajera, que estos últimos tiempos ha tenido que detener las maletas para hacer un viaje a su mundo interior y aprender de su tranquilidad y su paz, en sus rutinas que la contienen. Ha lo grado atravesar momentos muy críticos como perder a una nieta y a un hijo, ellos no deberían faltar en este festejo, aunque sí, estarán con nosotros de otras formas.
Pero también ha logrado disfrutar muchos bellos momentos con sus nietos y ahora con quien le da mucho amor y sentido de vida: su bisnieto, que la hace suspirar y sonreír como nunca imaginé verla sonreír… porque el amor y las sonrisas que te pueden sacar los hijos son unas, los nietos otras, pero los bisnietos ya son la cereza del pastel, así que a sus 80, ella tiene muchas experiencias vividas, y muchas historias que contar.
Una mujer viajera
Hace unos años en uno de los bellos viajes que hicimos juntas, sentadas en la Plaza Mayor de Madrid, tomándonos un descanso con unos vinos y un maravilloso jamón de bellota, le pregunté, «Ma, ¿qué es lo que más te gusta de viajar?» Y ella me dijo, «Todo eso que puedes recordar y platicar después de haber visitado y vivido tantas experiencias al conocer lugares, personas, y estilos de vida nuevos, de otros lados que nunca había visto, que no sabía que existían, eso que puedo recordar y revivir una vez que regreso a mi vida de siempre.”
Hoy, creo que podemos hacer un recuento maravilloso de muchas historias desde ese primer viaje a Europa que hizo a sus 33, que le cambió la vida y que la ha traído hasta el día de hoy, llena de experiencias, momentos vividos, felices, tristes, y emocionantes, de todo, como debe ser una vida plena que tiene un recuento para celebrar.
¡Muchas felicidades ma, y sobre todo muchas gracias por ser mi mamá y haberme regalado tantos momentos para disfrutar en la vida, estoy feliz de haber aprendido a gozar la vida contigo! Continuemos el viaje un rato más, y disfrutemos de más historias y experiencias que la vida todavía tiene para regalarnos.
Serie despertar y permanecer despierta
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