Hoy vamos a hablar de un tema que muchas hemos sentido alguna vez pero quizás no le hemos puesto suficiente atención: ¿cómo afecta nuestro ciclo menstrual al deseo sexual? Sí, ese vaivén hormonal que experimentamos mes a mes puede tener un impacto directo en cómo nos sentimos, nuestras ganas y hasta nuestra libido. Así que prepárate para entender mejor tu cuerpo y aprovechar esa información para sentirte más conectada contigo misma.

Autocuidado sexual de mujer joven

¿Por qué nuestro ciclo menstrual influye en el deseo sexual?

Primero lo primero: nuestro ciclo menstrual no es solo una cuestión de días rojos y cambios de humor. Es un proceso biológico súper complejo que involucra fluctuaciones hormonales que afectan todo, desde nuestro estado de ánimo hasta nuestra energía y, claro, nuestro deseo sexual.

Las principales protagonistas aquí son dos hormonas: estrógeno y progesterona. Durante la primera mitad del ciclo (la fase folicular), los niveles de estrógeno aumentan, lo que suele hacer que nos sintamos más energéticas, felices y con ganas de socializar… ¡y también con más interés en el sexo! Luego, en la ovulación (alrededor del día 14 en un ciclo típico de 28 días), los niveles de estrógeno alcanzan su punto máximo, potenciando aún más ese deseo.

Por otro lado, después de la ovulación entraremos en la fase lútea, donde la progesterona empieza a subir. Esta hormona puede hacer que algunas mujeres se sientan más cansadas o menos interesadas en el sexo. Y si no hay embarazo, los niveles hormonales bajan y comienza la menstruación… ¡y otra vez empieza el ciclo!

Vista lateral pareja acostada en la cama

La fase folicular: ¡más ganas y energía!

Durante los primeros días después de la menstruación, muchas mujeres sienten una especie de “renovación”. Los niveles de estrógeno están en ascenso, lo que aumenta la libido. Es como si tu cuerpo te estuviera diciendo: “¡Vamos allá!” Muchas reportan sentirse más sexys, seguras y con ganas de experimentar nuevas cosas en la cama.

Este momento es ideal para planear encuentros íntimos o simplemente disfrutar del sexo sin complicaciones. Además, las investigaciones sugieren que durante esta fase también aumentan los niveles de dopamina —el neurotransmisor asociado al placer— haciendo que cada caricia o beso sea aún más placentero.

Palma humana tocando tela magenta

La ovulación: ¡el pico máximo!

¿Sabías que muchas mujeres sienten un aumento notable en su deseo justo en el día de la ovulación? Es normal. Cuando estamos ovulando (que suele ocurrir entre los días 12 y 16 del ciclo), nuestros niveles hormonales alcanzan su punto máximo. Esto no solo aumenta el interés por el sexo sino también nuestra sensibilidad corporal.

Además, durante estos días muchas mujeres notan cambios físicos como mayor lubricación vaginal o sensibilidad en los senos. Todo esto forma parte del instinto reproductivo natural: ¡estamos programadas para querer tener sexo cuando somos más fértiles!

Por eso, si estás buscando concebir o simplemente quieres aprovechar esa etapa para explorar tu sensualidad, este es un momento clave.

Manos de primer plano con condón verde sin envolver

La fase lútea: ¿menos ganas o más en ciclo menstrual?

Después de la ovulación llega la fase lútea. Aquí los niveles de progesterona suben para preparar el útero por si hay embarazo. Pero muchas mujeres experimentan cambios emocionales y físicos durante estos días: sensación de cansancio, cambios en el estado anímico e incluso menor interés sexual.

Algunas reportan sentirse menos atractivas o con menos interés en el sexo, pero esto no es una regla fija. Cada mujer es diferente y puede experimentar estos cambios de manera distinta. Sin embargo, entender que estos altibajos hormonales son normales ayuda a quitarle presión a esos días en los que quizás no tengas tantas ganas.

Además, en esta etapa muchas mujeres experimentan síntomas como hinchazón, sensibilidad en los senos o cambios de humor, que también pueden influir en su deseo sexual. Pero ojo: esto no significa que debas sentirte mal por ello. Es solo una parte más del ciclo natural de tu cuerpo.

Vista superior mujer con esposas

Cómo aprovechar al máximo cada fase

Ahora que sabes cómo funciona tu ciclo, ¿cómo puedes usar esta información para mejorar tu vida sexual y sentirte más conectada contigo misma?

  1. Escucha a tu cuerpo. Presta atención a cómo te sientes en cada fase. ¿Tienes más energía y ganas de explorar en la primera mitad? Aprovecha esos días para experimentar cosas nuevas o planear encuentros especiales.
  2. No te juzgues. Si en ciertos días no tienes ganas, está bien. La libido fluctúa naturalmente y eso no significa que algo esté mal contigo.
  3. Comunícate con tu pareja. Compartir cómo te sientes puede fortalecer la relación y reducir expectativas. La comprensión mutua hace que todo sea más placentero.
  4. Cuida tu bienestar emocional. El estrés, la ansiedad y otros factores también afectan el deseo sexual. Practica técnicas de relajación, ejercicio y alimentación saludable para mantener un equilibrio hormonal óptimo.
  5. Experimenta con tu sensualidad. Usa estos momentos para conectar contigo misma, explorar tus fantasías o simplemente disfrutar del placer sin presiones.

Retrato de arriba de la mujer caucásica linda que presenta en la mañana soleada.

Mitos comunes sobre el deseo sexual y el ciclo menstrual

Antes de terminar, queremos desmentir algunos mitos que aún circulan:

  • “El deseo sexual desaparece durante la menstruación”.No siempre es así. Algunas mujeres sienten mayor interés justo antes o durante su período.
  • “Solo las mujeres fértiles tienen ganas de sexo”. La libido puede variar mucho entre una mujer y otra, independientemente de su etapa reproductiva.
  • “El ciclo menstrual determina completamente el deseo”. Aunque influye mucho, otros factores como el estado emocional, la salud física y las relaciones también juegan un papel importante.

Mujer en ropa interior negro se encuentra en la cama gris antes de la ventana

¡Conoce tu cuerpo y disfrútalo! 

La relación entre nuestro ciclo menstrual y el deseo sexual es compleja pero fascinante. Entender cómo funcionan esas fluctuaciones hormonales nos permite aceptarnos mejor, potenciar nuestra autoestima y disfrutar más de nuestra vida íntima.

Recuerda, cada mujer es única y sus ciclos también lo son. La clave está en escuchar a tu cuerpo, aceptar sus cambios y aprovechar cada fase para conectarte contigo misma —ya sea para tener un encuentro romántico, explorar tu sensualidad o simplemente descansar cuando lo necesitas.

Así que la próxima vez que notes un cambio en tus ganas sexuales, recuerda: ¡es totalmente normal! Tu cuerpo te está hablando y tú mereces escucharlo con amor y respeto.

Amiga KenaLovers, te invito a compartir este post con tus mejores amigas y puedan disfrutar de la sexualidad en pleno en período menstrual. Es un tabú pero, puedes experimentar el mejor sexo de tu vida.

Pareja acostada en la cama

Fotos Freepik


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