Vivir en una sociedad que sigue discriminando por razón de género significa que las industrias típicamente masculinas siguen siendo dominadas por hombres. Es el caso de la industria del juego, pues los casinos y los videojuegos históricamente han contado con una menor presencia de las mujeres.
Por suerte, esto parece estar cambiando poco a poco y la percepción general de lo que es el juego (desde los videojuegos a las tragamonedas o tragaperras online) ya no está tan asociada al “mundo de los hombres”. Las mujeres empiezan a imponerse en este sector y ya hemos presenciado cambios importantes que determinarían el futuro de la industria.
Las razones del cambio
Sin querer entrar en la teoría del género y por qué asociar ciertas actividades o comportamientos a uno de ellos es incorrecto, lo cierto es que el último informe de Global Web Index demuestra que asegurar que los videojuegos son cosas de hombres dista mucho de la realidad.
Dicho estudio concluye que el 50,4 % de los usuarios de juegos para móvil en España son mujeres, y que ellas también están interesadas en todo tipo de entretenimiento, ya sean juegos de acción y aventura, rompecabezas, deportes, juegos de rol o cartas.
Pero esta realidad no solo es la de España, pues estas estadísticas representan también la industria del juego de Estados Unidos, donde el 41 % de los jugadores son mujeres. Este país, cabe recordar, aporta casi la mitad de los ingresos mundiales del sector.
La sociedad está cambiando y, aunque todavía queda mucho para que sea igualitaria, ellas tienen hoy prácticamente las mismas posibilidades de acceso a los videojuegos, especialmente una vez han pasado la barrera que asocia este entretenimiento a las “cosas de hombres”.
Según varios estudios, la mujer ve en el juego una forma de evadirse de la realidad y los problemas, así como una manera de retarse a sí misma y superarse. También hay un componente social, razones que no distan mucho a las dadas por los hombres.
No podemos ignorar la gran labor que organizaciones como Women in Games están haciendo para que la industria gaming tenga cada vez una mayor presencia femenina. Su trabajo cubre tanto la mano de obra, el diseño de producto y la comunidad de jugadores.
Para conseguirlo, Women in Games tiene un programa de embajadores por todo el mundo, cuyo objetivo es apoyar a las mujeres dentro de la industria, pero también expandir su conocimiento sobre la industria. Se han propuesto doblar el número de mujeres en el sector en 10 años. ¿Lo conseguirán?
Las mujeres detrás del cambio
Más allá de organizaciones como Women in Games, ya hay mujeres en el mundo del juego que llevan años luchando contra los estereotipos de género y demostrando que no hace falta ser un hombre para ser bueno en el póquer o en el Assassin’s Creed.
Annie Duke
Annie Duke es considerada una de las mejores jugadoras de la historia del póquer. De hecho, consiguió estar en la élite de la industria durante 20 años, una experiencia que ha utilizado después para su carrera en el mundo de la psicología.
Foto Wikimedia Commons
Vanessa Selbst
Ser la única jugadora de póquer profesional en conseguir un número uno en el Global Poker Index, ahora convertida en inversora de Wall Street ya demuestra por qué es una de las mujeres más importantes del sector del juego. Y por si esto no fuera suficiente, también ha ganado tres brazaletes en la Serie Mundial.
Foto www.pokerphotos de Joe Giron
Jade Raymond
En el mundo de los videojuegos, Jade Raymond tiene un lugar especial, aunque su labor se haga de puertas hacia dentro. Sus principales contribuciones las ha hecho en la serie de Assassin’s Creed y su trabajo de producción, promoción y dirección es considerado pionero en el sector.
Imagen de Hobbyconsolas
Anna Prosser
Hablando de promoción, Anna Prosser se ha encargado de difundir la pasión por los videojuegos, especialmente por los eSports. Es una gran entendida en los videojuegos de competición como Starcraft II y seguro que es responsable de que muchas otras mujeres se hayan animado a formar parte del sector.
Twitter de Anna Prosser
Queda mucho camino para recorrer, pero nadie puede discutir los grandes pasos que se están realizando para combatir los estereotipos que siguen asociando el mundo del juego con los hombres.
Las mujeres también juegan y también lo hacen bien. Solo falta que se les dé el espacio que se merecen dentro de la industria, ya sea como tomando decisiones como en las mesas de juego.
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