Un tema controversial; sabemos que está el team «todos los días» y el team, «solo pocos días». Hoy vamos a hablar de lo que aseguran los primeros.

Lavarse el pelo un día sí y un día no, puede depender de diversos factores, como el tipo de cabello, el nivel de actividad física y la preferencia personal. El exceso de lavado puede eliminar los aceites naturales del cuero cabelludo, mientras que no lavarlo lo suficiente podría acumular grasa y suciedad. En última instancia, se recomienda lavarse el pelo un día sí y un día no para equilibrar la salud del cabello.

¿Qué origina el exceso de lavado?

Como mencionamos anteriormente, el exceso del lavado elimina los aceites naturales que produce el cuero cabelludo para mantenerlo saludable y nutrido. Estos aceites son esenciales para la protección y la hidratación del cabello.

Entonces, se puede despojar al cabello de estos aceites, lo que puede hacer que el cabello se vuelva seco, quebradizo y propenso a daños. Además, el cuero cabelludo puede reaccionar produciendo más aceite para compensar la pérdida, lo que lleva a un ciclo de lavado más frecuente.

Un estudio publicado en la revista «American Academy of Dermatology» en 2017 descubrió que lavarse el cabello una vez a la semana es suficiente para mantenerlo limpio y saludable.

Ahora pensando fríamente, ¿podrías lavarte el cabello una vez a la semana? Si padeces de cabello graso, creo que no será la mejor decisión.

Lavarse el cabello un día si y un día no, buena técnica. Foto Karolina Grabowska Pexels

Lavarse el cabello un día si y un día no, buena técnica. Foto Karolina Grabowska Pexels

¿Cómo sería un lavado correcto?

Hay algunos pasos básico que no debes pasar por alto, Kena te aconseja que:

  1. Usa un shampoo adecuado para tu tipo de cabello. Puede ser hidratante, para cabello graso, anticaspa, etc.
  2. Aplica una cantidad adecuada de shampoo. No es necesario usar demasiado; una pequeña cantidad suele ser suficiente.
  3. Masajea el cuero cabelludo con movimientos suaves usando las yemas de los dedos. Esto ayuda a limpiar y estimular la circulación sanguínea.
  4. Asegúrate de enjuagar completamente el shampoo. Los residuos pueden dejar el cabello apagado y causar irritación del cuero cabelludo.
  5. Si usas acondicionador, aplícalo solo en las puntas. Evita aplicarlo directamente en el cuero cabelludo para evitar la acumulación de grasa.
  6. Si es posible, enjuaga con agua fría al final para sellar la cutícula del cabello y proporcionar brillo.
  7. Lava tu cabello según las necesidades individuales. No es necesario hacerlo todos los días; la frecuencia depende del tipo de cabello y del estilo de vida.

Ajusta estos pasos según las características específicas de tu cabello para lograr un lavado efectivo y saludable. Si sigues estas especificaciones, amarás los resultados.



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