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Eduardo Segura, director general de The Cape, a Thompson Hotel, uno de los hoteles más exclusivos de Los Cabos, nos platica sobre las tendencias globales en turismo y cómo lograr que los clientes siempre quieran regresar. 

Por Bianca Pescador

Viajar es vivir. 

Estoy convencida que viajando no sólo conocemos personas interesantes, sino que expandimos nuestra mente y las infinitas posibilidades. No creo que, al menos personalmente, me guste viajar únicamente por vanidad, sólo por tachar los cuadritos que de pronto se vuelven tendencia en redes sociales, como este que andaba rondando por ahí:

Genuinamente creo que viajar nos abre el corazón, la mente y el espíritu… Y en ese subidón de dopamina, oxitocina y serotonina, también podemos conectar con algo más grande: la cultura de un lugar nuevo para nosotros, su gente, su ambiente, y darnos cuenta de la riqueza –de todo tipo– que hay en el mundo.  

En entrevista con Eduardo Segura, director general de The Cape, lo primero que me pregunta es hace cuánto que no voy a Los Cabos. “La última vez fue en 2009”, le confesé, “mi ex novio me dio el anillo en la Playa del Amor y como no me casé, me traumé. Quizá nunca quise volver porque me traía recuerdos dolorosos”. 

Permíteme compartir una imagen para suspirar juntas.

THE CAPE, UNA NUEVA OPORTUNIDAD 

Director general de The Cape desde hace 10 años, Eduardo asegura que los clientes que han recibido –y vuelven continuamente al hotel– son de primer nivel.

¿Qué los cautiva? Un conjunto de variables:
1) que son un hotel relativamente pequeño (159 habitaciones)
2) que se mantienen al tanto de las tendencias
3) que los hacen sentir como en casa

“En cuanto a tendencias, hay muchas porque hablamos de un estilo de vida, donde entran los alimentos, las bebidas, el ejercicio, las actividades… Nosotros tratamos de siempre respetar la integridad de lo que ofrecemos, por más sencillo que sea, y no hablo de sofisticación, hablo de dar un servicio de calidad y hacerte sentir como si estuvieras en casa, que es otra tendencia”, dice Segura Vehovec.

Orgulloso de ser mexicano, Eduardo me pide comprobar que en The Cape no pecan de sentirse gringos. Esto sale a colación porque le platico que una pareja que acaba de ir me contó que en este otro afamado hotel todo el tiempo les hablaban en inglés.

“Aunque el 80% de nuestros huéspedes son extranjeros, te pido que hagas la prueba. Marca a mi hotel, ¡te vamos a contestar en español! Y cuando te metas a la página web, te voy a dar la tarifa en pesos, y no sólo eso, sino que te voy a dar un beneficio en la tarifa. Eso es lo que ha hecho que nos ganemos la confianza tanto de los locales como de los clientes nacionales. 

“Si bien es cierto que Los Cabos nació como un destino vacacional para los americanos, para nosotros es importante no dejar atrás el mercado nacional porque la industria tiene sus altas y sus bajas, y quienes no lo valoran, más tarde que temprano se van a arrepentir y lo van a salir a buscar, entonces mejor apreciarlo y tratarlo bien desde el principio”, expresa Segura.

Segura Vehovec revela que hacer sentir bien a la comunidad local ha sido un gran acierto, pues constantemente rentan los espacios del hotel para distintos eventos sociales.

«Regularmente para la apertura de un hotel contratan a un americano, en este caso no. The Cape decidió contratar a un mexicano y desde hace 10 años estamos poniendo en alto el nombre de la marca».- ESV

LUJO, PLAYA Y ROCK & ROLL 

Así como uno viaja a distintos lugares esperando vivir distintas experiencias, podemos decir que el cliente de Los Cabos es uno que busca, principalmente, 3 cosas: exclusividad, conexión y descanso activo, es decir, no solamente dormir delicioso, sino estar en la alberca (infinity pool, por supuesto) disfrutando de una bebida súper glam, mientras se disfruta del espectáculo que dan los surfistas locales. 

“Los Cabos como destino se ha caracterizado por ser una hotelería exclusiva, de lujo”, comenta Segura Vehovec. “Como The Cape te podría decir que nuestro fuerte es el lifestyle y nuestro diferenciador es lo no masivo porque no podemos comparar las 3 mil habitaciones de un hotel en la Riviera Maya a las 159 que tenemos aquí”. 

Para el director general, la naturaleza también es un gran atractivo del destino en general, pues la ubicación estratégica se presta para realizar múltiples activididades en escenarios tan diversos como la playa, las dunas, el océano o el campo de golf. 

“Sólo quiero aclarar que Los Cabos no es un desierto, es una zona tropical árida ubicada a tan sólo 60 km del Trópico de Cáncer, lo que hace que tengamos una naturaleza muy peculiar y llena de contrastes, donde cuando llueve todo se vuelve verde, es una maravilla”, expresa el hotelero.

The Cape tiene muchas cualidades para competir con otros hoteles de Los Cabos. Una de las más fuertes es que se encuentran frente al famoso Arco y que el 100% de las habitaciones tiene vista al mar.

Otro de los grandes diferenciadores de The Cape es la variedad de espectáculos que ofrecen, que van desde música en vivo y DJs nacionales e internacionales hasta conciertos de artistas como Moenia, Alek Syntek y Ximena Sariñana, que van más dirigidos al público local. 

“Ahora te voy a contar lo que llevamos ya casi 5 años haciendo y es algo que llamamos ‘Switching Gears’, con lo cual buscamos que salgas de tu área de confort. Es una celebración de 5 días en donde hay comida, bebida, surf, música, arte y muchas actividades diferentes, nuevas, tanto dentro como fuera del hotel, y todos los huéspedes van a poder participar. Este año será del 3 al 7 de julio y las lectoras de Kena están cordialmente invitadas”. 

Antes de colgar la llamada, Eduardo recomienda visitar The Cape en temporada de ballenas, pues asegura que es todo un espectáculo estar desayunando en tu terraza privada mientras una mamá ballena salta junto a su bebé. Definitivo me gustaría ver eso con mis propios ojos. 

Trendy, moderno, actual, pero sobre todo, sexy. Así describe Segura Vehovec a The Cape, una joya arquitectónica diseñada por el arquitecto mexicano Javier Sánchez, con interiores que combinan el modernismo mexicano con el alma relajada de la Baja, donde los chefs Enrique Olvera y Ari Reyes tienen sus centros gastronómicos más sofisticados, Manta y The Ledge respectivamente. 

No sé tú, pero al terminar de escribir esto ya estoy visitando la página de la aerolínea para ver qué día me voy. ¿Nos vamos juntas? Promete ser una experiencia inolvidable. 


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