El tema de la maternidad es uno de mis favoritos, porque cuando me convertí en madre fue un momento crucial de mi vida y la cambió para siempre. Pero nunca me imaginé qué quería decir con “la cambió para siempre” y creo que en buena medida está relacionado con esto de la conciencia, así que les invito a explorar lo que significa la maternidad desde mi punto de vista.
Maternidad consciente
Creo que debemos empezar por establecer lo obvio, que esto solo puede suceder en un cuerpo de mujer, así que solo la mitad de la población mundial tiene un cuerpo apto para tal evento, por lo tanto, miremos de cerca esto tan importante que es reconocer que nuestro cuerpo está diseñado para gestar vida y para eso necesitamos aprender a reconocer, honrar y respetar los ciclos que vivimos las mujeres con este fin.
Nuestro cuerpo funciona de una manera extraordinaria y maravillosa con la intención, entre otras cosas, de poder desarrollar la vida de un ser humano en nuestras entrañas.
A partir de aproximadamente los 10 años la mujer comienza a menstruar y entonces su cuerpo nos anuncia que está casi listo y madurando cada vez más para poder desarrollar a un ser vivo en su útero.
Quiero mencionar que esto no quiere decir ni que a los 10 años estemos listas para ser madres, ni que toda mujer deberá serlo, por supuesto que no. Solo nos recuerda mes con mes que esa opción está ahí para ser utilizada si así lo quiero, porque mi cuerpo está diseñado para ello. Entonces, como decía, mes con mes, por aproximadamente 40 años voy a tener la posibilidad de hacer uso de esta oportunidad.
La cosa es que estos ciclos que vivimos las mujeres son tan complejos y tan extraordinarios, cada mes, que no importa que no lo utilicemos, el próximo mes estará de nuevo ahí para volver a tener la oportunidad de hacer uso de él.
Cuando sí utilizamos esta oportunidad de fecundar al ovulo y comenzar con la mágica experiencia de gestar vida dentro de nuestras entrañas, el proceso continúa, y ese ciclo que se interrumpía por no haber fecundado y se iniciaba de nuevo, ahora sigue su cauce y continúa desarrollando todo aquello que genera dentro de este cuerpo de mujer, preparándolo todo para desarrollar a un nuevo ser vivo. Entonces continúan las descargas hormonales y todos los ajustes necesarios para que por nueve meses esta vida crezca dentro de la mujer.
Dentro del cuerpo hay toda una revolución, y todos estos cambios afectan de muchas formas a la mujer que los vive. Todas de alguna manera hemos experimentado una pequeña prueba de los cambios que se dan al inicio del ciclo, que se incrementarán enormemente cuando éste no se interrumpe al quedar embarazada.
Reconocer lo importante de este impacto es fundamental porque así podemos comprender poco a poco todo esto que nos está transformando y que nos dejará totalmente cambiadas, y saber esto creo que es muy importante porque así podremos ser amorosas y pacientes con nosotras mismas en el camino de reinventarnos.
Cambios hormonales, cambios del cuerpo, cambios de estado de ánimo y sensibilidad, una intuición más desarrollada, todo esto que no sentía antes, hace que la mujer se desconozca y sienta inseguridad en sí misma.
Poco a poco puede ir integrando estas habilidades que son muy útiles cuando una se inaugura como madre, la cosa es que esto desconcierta, porque antes no era así, y si le sumamos el cambio del cuerpo, subir de peso, y verse diferente en el espejo también desconcierta.
Reencontrarse con una misma, para reconocerse y aceptarse ante tanto cambio requiere de tiempo y también de un duelo, porque ya no será la misma de antes, así que honrar el duelo de la que no seré más y permitirme descubrir a mi nueva yo es parte del proceso que conlleva la experiencia de ser mujer, y de ser madre, y hay que reconocerlo y aprender a vivir con esto.
Nosotras como mujeres, podemos acompañarnos y contenernos para salir adelante de estos procesos, pero para eso necesitamos aprender a reconocerlos y aceptarlos y celebrarlos, porque aquí, creo yo, se encuentra el reconocimiento del poder femenino.
Serie despertar y permanecer despierta
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