Existen aromas que tienen poderes casi mágicos: nos calman, nos transportan a algún lugar, traen recuerdos y reconfortan.
Por eso, la aromaterapia es magnífica para ciertas personas… ¿por qué no intentarlo con los bebés?
Propiedades calmantes de la lavanda
Caminar junto a un jardín lleno de sus plantas pone de buenas. Además de ser bellísima su flor, esos aromas que despiden las hojitas moradas son magníficos para relajar.
También hay que decir que su peculiar perfume es utilizado por las grandes casas perfumistas del mundo como uno de los ingredientes estrella.
Se puede tomar como infusión para dolores de cabeza. También se aplican aceites esenciales sobre picaduras de insectos, por sus propiedades antisépticas y desinflamatorias. Sobre las sientes para la migraña o hasta para conciliar el sueño es una delicia.
Respira mejor con eucalipto
Las mamás y abuelas utilizan remedios de eucalipto dese hace muchos años. Sus aromas tan particulares que descongestionan y también relajan.
Se le atribuyen tres propiedades características: antiinflamatorias, antimicrobianas y expectorantes.
Lo puedes aplicar directamente en picaduras de mosquito, también en forma de infusión tipo sauna para descongestionar vías respiratorias.
Aromas que ayudan al bebé
- Elige productos creados especialmente para la piel delicada del bebé, y más si lo vas a untar.
- Puedes poner unas gotitas de aceites esenciales en el agua de su baño antes de dormir, para estimular el sueño.
- Un masaje con un bálsamo relajante en sus pies, brazos, piernas, espalda y pecho, además de que calma, incentiva el apego entre mamá y bebé.
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