Camille Marie Kelly Gottlieb nació el 15 de julio de 1998, como fruto de la relación sentimental de su madre, la princesa Estefanía de Mónaco, con su ahora exguardaespaldas, Jean Raymond Gottlieb; y, según dicen quienes la conocen, de la familia es la que más se parece a la recordada Grace Kelly, gracias a su belleza y personalidad.
Al ser su padre un “plebeyo”, y no haber formalizado el noviazgo, Camille no tiene título nobiliario, por lo que no forma parte de la dinastía Grimaldi y, por supuesto, tampoco está en la línea sucesoria al trono; sin embargo, esta no es la razón que la mantiene en las sombras, sino su madre, quien desde pequeña decidió no exponerla al escarnio público.
Son pocas las veces que se deja ver; de hecho, además de asistir ocasionalmente a fechas importantes del mundo royals, como por ejemplo, cuando fue al bautizo de sus primos, los pequeños Jacques y Gabriella. Por otro lado, donde siempre podemos ubicarla es en el Festival Internacional de Circo en Montecarlo, puesto que heredó de Estefanía la pasión por la vida circense. No es demasiado diferente a las otras chicas y eso se debe a que ha mantenido, dentro de lo que cabe, una vida normal. En su cuenta en Instagram @camillerosegottlieb -en la que posee más de 13 mil seguidores- te puedes dar cuenta de que, al igual que el resto de los mortales, le gusta viajar, salir de compras, festejar con amigas y su novio, el modelo Thomas Martini, firmado por una importante agencia neoyorquina y otra de Barcelona –MSA Models y Traffic Models-.
Aunado a todo lo anterior, cabe destacar, que el hecho de “tenerlo todo” no la hace despegar los pies de la tierra; por lo que Camille estudia fotografía en el centro de prensa de Mónaco, y realizó sus primeras prácticas con la cámara en actos oficiales de su tío, el príncipe Alberto II. Ha sido constante en los estudios para ser un profesional en lo que le gusta.
Con respecto a sus hermanos, Pauline y Louis, sí que mantiene una diferencia gigante, y no solo porque sea la más anónima, sino que, según lo dicho por ella misma, se siente más rebelde que ellos: “Soy la más indisciplinada. Tengo un carácter muy enérgico, me pongo nerviosa fácilmente por poca cosa. Pauline es discreta, más tranquila. En cuanto a Louis, es un gruñón”, confesó en una entrevista; además, agregó que su hermano es quien cuida de ellas en todo momento: “Cuando estamos los cuatro, él es un poco el hombre de la familia. Vela por sus mujeres y se toma el papel muy en serio”. A su madre, Estefanía, la ama como cualquier otra hija puede amar a su mamá, y así lo confirma en sus fotos posteadas en la red social Instagram; de hecho, hace un par de años enterneció a sus seguidores con unas dulces palabras dedicadas a la princesa: “Tengo una foto de cuando era bebé, en la que me coges en brazos. La llevo guardada en la agenda. La miro a menudo, y me doy cuenta de lo que te echo de menos cuando no estoy contigo”.
Síguenos en redes sociales como @KENArevista:
