Útero sagrado, centro de poder… y de memorias ancestrales.
Sumisión, frustración, abusos, pérdida de hijos, abortos… ¿Sabías que todas las memorias de dolor están grabadas en nuestro útero?
Y si con fortuna estas memorias se encuentran en ti todavía dormidas, bastará con que se repitan estos conflictos para que la memoria se active.
¿Cómo sanar o prevenir?
El collar de ancestras puede ayudar.
“La intención del collar de ancestras es darle sanación a esas memorias, tanto en nuestro útero como en nuestra memoria akáshica, para todas nuestras ancestras y para todas las mujeres que vendrán después de nosotras; nuestras hijas y las hijas de nuestras hijas”, dice la psicóloga transpersonal Jessica Macías, fundadora de la tribu de brujas modernas 13 Lunas.
Nuestro linaje materno llora en nuestro propio cuerpo todas aquellas tristezas, violencias, abusos y dolores que cada una de las mujeres no pudo sanar, incluyendo todo aquello a lo que no supieron darle lugar, que fue impuesto, no reconocido o no aceptado.
UNA HERRAMIENTA DE PODER
El collar de ancestras es una herramienta de poder que nos permite reconocer a cada una de las mujeres de nuestro linaje; es una manera mágica de honrarlas, hacerlas sentir amadas y agradecerles por habernos dado la vida, ya que cada una de ellas fue indispensable en la ecuación para que hoy cada una de nosotras esté en este plano, encarnada, en un vehículo físico que lleva codificadas todas sus historias.
“Las mujeres que influyen en nuestra vida son las que pertenecen a las últimas siete generaciones de nuestro árbol genealógico”, explica Jessi, “por ese motivo para realizar el collar necesitamos 127 cuentas naturales; pueden ser de piedras y semillas perforadas, o en última instancia, de madera o vidrio”.
Estas cuentas representan:
1 * A mi madre (1ra generación)
2 * A mis abuelas (2da generación: 1 del linaje materno y 1 del linaje paterno)
4 * Mis bisabuelas (3ra generación: 2 del linaje materno y 2 del linaje paterno)
8 * Mis tatarabuelas (4ta generación)
16 * Mis tátara tátara abuelas (5ta generación)
32 * Mis tátara tátara tátara abuelas (6ta generación)
64 * Mis tátara tátara tátara tátara abuelas (7ma generación)
“El darles un espacio a través de algo físico –como las cuentas de un collar y un altar para honrarlas– ayuda a que dejemos de ‘cargarlas’ nosotras. Este ritual es hermoso también porque, al darles un lugar afuera, es más fácil brindarles reconocimiento y sanación”, puntualiza Jessi Macías, quien recomienda no colocar el altar en la propia recámara, sino en otro lugar de la casa como puede ser la cocina, la sala o el jardín.
*Esto de la recámara es porque la energía que puede desprender el altar en ocasiones no deja dormir bien o descansar propiamente a las personas, sobre todo si son muy perceptivas.
RITUAL SAGRADO
El ritual del armado del collar es simplemente mágico, sensacional y una experiencia que ojalá todas las mujeres tuviéramos la oportunidad de vivir; se recita un mantra conforme se va hilando –cuenta por cuenta– y al final se hace una oración súper poderosa (te lo comparto porque yo ya hice el mío en el retiro que tuvimos).
“Este collar es ideal para utilizarlo como herramienta de empoderamiento y fortaleza. Este contacto con el útero es el camino que nos lleva a sanar, reconocer y conciliar conmigo, con mi madre, con mis abuelas, con todas mis ancestras; es desde lo femenino que me reconozco, crezco y comprendo mi ser y mi sentir”, dice Jessi.
De acuerdo con esta bruja moderna, discípula de la sacerdotisa andina Josefina Merlo, el trabajo de sanación de linaje femenino nos permite soltar las cargas que no nos pertenecen y despertar nuestros dones para, de esta manera, tomar nuestro destino con profunda libertad interior.
“Hoy es el mejor momento para iniciar la exploración, para navegar en los recuerdos albergados en nuestro vientre, para dar paso a la comprensión. Con el corazón en la mano lo digo: reconciliarnos con el lado femenino de nuestra vida, el útero y nuestro cuerpo femenino es uno de los trabajos más hermosos que podemos vivir como mujeres”, asegura Jessi.
Si te llama la atención lo que leíste y encuentras en tu corazón el llamado para crear tu propio collar de ancestras, te esperamos el próximo domingo 2 de mayo a las 11:11 de la mañana en el Bosque de Chapultepec de la CDMX para armarlo en tribu.
El evento tendrá una cuota de recuperación de $250 pesos y es mixto, es decir, ¡¡¡los hombres también son bienvenidos!!!
Para mayores informes, escríbenos a creandomagiajuntas@gmail.com
Síguenos en redes sociales como @KENArevista: