El consumo de frutos secos, como nueces, almendras y avellanas, puede ser muy beneficioso para la salud. Estos alimentos contienen altas cantidades de nutrientes, como vitaminas, minerales y fibra, que son muy saludables para el cuerpo. Además, los frutos secos son una fuente excelente de grasas saludables y de proteínas de alta calidad.
La hora ideal para comer frutos secos puede variar según tus preferencias personales y tu estilo de vida y hoy vamos a conocer un poco más al respecto.
Un estudio realizado por el Consejo de Estudios de Frutos Secos en 2011 demostró que ingerir una pequeña porción de nueces al almuerzo puede ayudar a reducir el hambre y los antojos en las horas posteriores.
Frutos secos, nuevos mejores amigos. Foto Antoni Shkraba Pexels
Comer frutos secos en horas específicas es más beneficioso de lo que creemos
Aquí hay algunas sugerencias:
Snack saludable por la mañana
Son una excelente opción como snack saludable entre comidas. Puedes disfrutar de ellos por la mañana o por la tarde para mantener la energía.
Como parte del desayuno
Puedes agregarlos a tu desayuno, como esparcir almendras en tu cereal o yogur, o incluir nueces en tu avena.
Antes de hacer ejercicio
Pueden proporcionar energía sostenible, por lo que comer un puñado antes de hacer ejercicio puede ser beneficioso.
En ensaladas y platos
También puedes incorporarlos en tus comidas principales, como ensaladas o platos de proteínas. Son una gran adición para agregar sabor y textura.
OJO: Evitar antes de dormir
Debido a su contenido calórico y graso, es recomendable evitar comerlos en grandes cantidades justo antes de acostarte, ya que podrían dificultar la digestión.
En última instancia, la clave está en equilibrar su consumo con tu dieta general y tus necesidades nutricionales personales. Asegúrate de elegir opciones sin sal o con bajo contenido de sal para mantener una alimentación saludable.
Foto principal Vanessa Loring Pexels
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