¿Qué nos depara después del gran día de la boda? Es uno de los temores de toda pareja.

Luego de disfrutar la gran celebración es conveniente que sepas algunos puntos importantes que se convierten en la base fundamental para que el matrimonio empiece con el pie derecho.

5 consejos para ser feliz después de la boda

  • ¿La boda es el fin como en las películas? Desvincula las novelas con tu vida real. La ventaja de la última es que solo tú puedes amoldarla a sus deseos y lograr que todo lo que anhelan sea tangible.

En este sentido, internaliza que la boda no es el fin del noviazgo. Es precisamente todo lo contrario. Cuando te casas, estás iniciando una nueva etapa recargada de muchas energías. Está en ti qué vertiente le das a tu relación. ¡Siempre persigue el lado positivo!

  • Expectativas reales: “No todo es color rosa”, por lo tanto, es muy probable que durante tu matrimonio existan altos y bajos. Esto puede llegar a preocuparles, pero ¿es normal, cómo lo manejo? El nivel de deseo se transforma y no será igual a cuando estaban iniciando la relación. No te aflijas por eso, pero tampoco te quedes de brazos cruzados. ¡Reinvéntense siempre!
  • Cero comparaciones: No intentes comparar tu vida de pareja con la de tus amigas o familiares. La comparación es el alimento preferido de la insatisfacción, el desencanto y cualquier problema que quebrante la paz y el equilibrio con tu pareja.

Sería fantástico que crearas tú misma una historia auténtica, sin copias ni imitaciones. Realmente esto pudiera ser muy frustrante para ambos.

  • Las amistades son importantes: El respeto, cariño y admiración que tienes hacia tus amigos debe ser un sentimiento que no puede cambiar al estar casados. Las amistades de tu pareja, al igual que las tuyas, requieren las mismas atenciones y el mismo respeto. No se alejen de sus vidas sociales y cumplan como buenos amigos que siempre han sido.
  • Si existen rutinas, que sean felices: Después de la boda, empieza una vida diferente, donde hay que darles la vuelta a las letales rutinas. Qué diferente sería si en vez de huirles, las modificáramos, ¿no te parece? Convierte cada rutina en planes divertidos para que ninguno de los dos se aburra.

Por ejemplo, las cenas, que sean fuera de lo común los fines de semana, o antes de llegar a casa. Coincidan en un lugar que les llene de paz para desechar todo el estrés del trabajo.

¿Qué tal si un sábado se dedican ambos a limpiar su casa y ponen música a todo volumen? Además de limpiar, pueden iniciar una creativa bailoterapia. ¡Que viva el amor limpio y bailable!

Además de hacer que la rutina del día a día sea diferente, puede servir de terapia para liberar energías negativas y para recargar las pilas en la relación.

 

LEER MÁS SOBRE: PLANIFICA TU BODA MES A MES ¡PROBADO Y COMPROBADO!

Escucha más consejos para tener un gran matrimonio (o bueno, uno bien trabajado):

Al tomar en cuenta estos puntos, puedes confiar en tu pulso y disfrutar de un matrimonio feliz, superando los obstáculos y aprendiendo día a día de lo maravilloso que puede ser vivir en pareja.


Síguenos en redes sociales como @KENArevista: