Queridas amigas de todas las edades, colores, sabores y medidas, me topé con la lencería ideal para hacernos sentir cómodas y sexis en un vestido, faldita, leggings o pantalones entallados.
Eso de la ropa pegadita no es solo para las modelos súper fit, cualquier talla de busto, caderas y silueta en general podemos vernos (y sobre todo sentirnos) súper en la ropa que queramos.
La lencería Líz, que apenas descubrí, resultó ser toda una maravilla brasileña. Y cuando viene de ese país que, por muchos motivos quiero y admiro, hay que echarle un ojo, pues su industria de la moda y telas siempre va un paso adelante en vanguardia, además de ser ecoamigable y socialmente responsable en la mayor parte de sus firmas.
Te platico que los valores de esta -riquísima al tacto- lencería son fomentar la comodidad, la autoestima y la elegancia; para esta firma eso es vanidad: valorarnos.
Tienen una amplia gama de sostenes que contemplan las necesidades de un busto pequeño como el Push up, que acerca y aumenta. Para uno mediano el Lift, que levanta y modela. Y para las tallas más grandes existe el Reducer, que reduce y sostiene. ¡Además de bellísimos Bralettes para que se vean! Y la novedad del Sutop, un bra que a la vez es top.
Otro gran acierto de la marca son sus Shapers (o prendas formadoras), que siluetean y sostienen “lo que haya que sostener”. Tanto bodys para abdomen y la parte superior del cuerpo como bermudas para piernas, pompas y caderas, que además puedes utilizar juntas o por separado; tienen varios largos y cortes de acuerdo con las necesidades de tus prendas externas. Elaboradas con microfibra compacta para sentirte fresca, nunca encerrada ni metida a presión. Disfrazan la celulitis y la flacidez, su corte está hecho con lasser, así que no se van a marcar en tu ropa ni encajar en tu cuerpo. ¡Toda una tecnología invisible!
¿Ya se te antojaron?
En México, las encuentras en Palacio de Hierro, Liverpool, Sears y La Marina.
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