
En una nota anterior aprendimos de qué va este término y cómo podemos mantener una postura personal sin afectar a los demás.
Se abrió una interrogante directamente relacionada con esta temática. ¿Cómo se aplica en el ámbito sexual?
En Kena decidimos dividirlo en cuatro vertientes comunes:
-Mujeres open mind por conveniencia propia. Son féminas que no tienen miedo a hablar de cualquier tema, no se sienten cohibidas de opinar sobre lo que piensan. No temen experimentar en la cama (o en el sofá, lavadora, automóvil). Aunque no han probado TODO, tampoco se limitan de hacerlo en pareja o con «amigos ocasionales«. Pueden acostarse o juguetear con personas del mismo sexo y realizar tríos u orgías. No se inquietan por el qué dirán.
-Relaciones open mind. Los involucrados no se preocupan por el compromiso, solo desean vivir el ahora. Es una «unión» relajada y sin ataduras en la que se reúnen cuando pueden, sin presiones ni reclamos. Ambos pueden contar con otros compañeros sin temor alguno. Dan espacio y esperan recibirlo. Esto puede cambiar si alguna de las partes termina enamorándose, lo que es una decepción para el implicado que quiere continuar bajo los mismos parámetros.
-Mujeres open mind por complacer a su pareja. Son aquellas chicas que no lo piensan dos veces antes de lanzarse en una práctica que hará feliz a su compañero. Quieren mantenerlo con ella y, sin importar el precio, terminarán pagándolo. Algunas se dejan llevar y terminan disfrutando del encuentro, otras -como mi amiga- saldrán corriendo del hotel. Kenita pensó que sería pan comido, evaluó todos los escenarios posibles y, el interactuar con otra mujer, no le pareció fin de mundo. Solamente olvidó un detalle, tendría que compartir a su hombre en la cama, la atención no sería solo para ella, ni mucho menos el placer. Amiga, evalúalo dos veces si aún tienes interrogantes.
-Parejas open mind. Están juntos, se quieren, comparten intereses, pero no se molestan si surge algún episodio donde puedan intercambiar (swinger), llevar a cabo un trío donde ambos participen o cualquier otra aventura.
Lo más importante es que nunca hagas nada que no te provoque. Nadie puede obligarte ni hacerte sentir vulnerable. ¡Tú decides sobre ti y tus acciones!
Recuerda que todo esto es muy relativo. No hay una definición exacta ni una medida para saber si eres lo suficientemente «mente abierta» o no. Cada persona es diferente y puede variar.
#MujeresAyudandoaMujeres
#MujerKena
Síguenos en redes sociales como @KENArevista: