Dale la importancia que amerita a tu salud íntima y evita ciertos hábitos que afectan directamente tus ovarios.

¿Te importa comer demasiada chatarra? ¿Vale la pena estresarte por nada? Preguntas como estas son las que debes hacerte para cambiar tu estilo de vida y cuidar tu órgano reproductor.

¡No lo hagas!

  • No le des espacio a las depresiones o ansiedades: aunque parezca que una cosa no tiene que ver con la otra, sí la tiene. Al deprimirte tus defensas se debilitan y afecta directamente las funciones de los ovarios.

Trata de vivir una vida relajada y alegre, tu estado de ánimo afecta tu salud física y tus ovarios no se están exentos.

  • Sufres de obesidad: no es lo mismo tener unos kilitos de más a sufrir de obesidad, esta última es un enemigo para tus ovarios. Desajusta tu metabolismo, alterando las hormonas y ¿sabes qué pasa cuando esto ocurre?, las posibilidades de quedar embarazada de forma natural se limitan, ocurren ciclos irregulares en tu menstruación y puedes padecer de endometriosis.
  • Ser madre en edad avanzada: si bien es cierto, los hijos llegan en el mejor momento y cuando tienen que llegar, pero hay cosas que necesitas saber. Por diferentes factores, las mujeres de la actualidad deciden ser madres después de los 30, pero el lado negativo de esto es que, según afirman los especialistas, estas medidas tienen un impacto poco favorable en la salud y calidad de los ovarios. Junto con tu pareja y médico, pueden evaluar tu caso.
  • Comer alimentos ricos en grasas: los médicos especialistas en el tema señalan que al saturar tu cuerpo de grasas es posible que aparezcan tumores en los ovarios. ¡Sustitúyelas por proteínas!

 

  • Fumar cigarros: con un cigarro que fumes pierdes capacidad reproductiva y adelantas el proceso menopáusico. ¡Ni uno más!

 

  • ¿Sufres del Virus Papiloma Humano?: es posible que tus ovarios se infecten generando desgastes en el órgano.

La recomendación es cuidarte en cada relación sexual y hacerte una prueba anualmente para descartar.

  • Beber alcohol sin control: esto afecta muchísimo el ciclo de los ovarios, generando abortos o partos prematuros.

 

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