Ubicado en Paseo de la Reforma, nos adentramos en una especie de caja construida por pérgolas de madera donde la luz se filtra para iluminar y descubrir los encantadores sabores del mar. Es aquí donde el restaurante “Piedra Sal”, cuyo nombre se basa en la sal marina, ofrece a sus comensales una variedad de platillos a partir de los productos que nos ofrece el océano.
Tania Ortiz
La experiencia comienza al entrar, pues la arquitectura del lugar nos brinda una sensación de alegría y tranquilidad, el lugar perfecto para una tarde de convivencia. El establecimiento, diseñado por la arquitecta Verónica Gonzáles Zavala, recientemente fue premiado por el Continental Prix Versailles en la categoría de restaurantes de Norteamérica.
En cuanto al menú, se ofrece una variedad de platillos con productos del mar donde el pulpo es su fuerte, pues es preparado de cierta forma que la textura resulta ser muy suave y fácil de masticar. Además de los ingredientes marítimos, también pueden encontrarse opciones vegetarianas o de carnes.
Definitivamente tienes que probar una de las especialidades de la casa. Como entrada te recomendamos los picositos aguachiles de camarón, o si prefieres el tiradito de pulpo. De plato fuerte, el pescado al pastor en salsa de piña o el pulpo a las brasas, son dos platillos exquisitos, y claro, de postre no puede falta un pastel de zanahoria, súper suave y con ingredientes naturales. Lo extraordinario del menú es que todas las recetas son originales y con un toque mexicano.
Recientemente se ha incrementado el “Brunch” los domingos, ideal para ir con la familia en un horario de 10:00 am a 2:00 pm.
Restaurante Piedra Sal Paseo de la Reforma 1101, Lomas de Chapultepec V Sección
Un restaurante recomendable para asistir acompañado de familia, amigos o en pareja.
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