Si vives en la CDMX y sientes que la llama de la pasión con tu pareja se apaga poco a poco, uno de los mejores tips que te podemos dar es romper la rutina y hospedarte en cualquiera de los tres hoteles que Pug Seal tiene en Polanco (también tiene otro en Coyoacán, por si prefieres el sur).

Cabe aclarar: Pug Seal también es una excelente opción si eres foránea y vienes a visitar la Ciudad, ya que las cuatro ubicaciones están estratégicamente ubicadas de la mayoría de las atracciones turísticas.

En Polanco, por ejemplo, tú decides si quieres patinar, andar en bici, agarrar un scooter, usar el transporte o tomar un Uber/Didi para llegar a tu destino. Así de bien ubicado está.

Pero volviendo al tema de la pasión, aquí te va mi opinión: por mucho tiempo hemos pensando que para romper la monotonía de la relación hay que irse a un motel, y tengo muchas amigas a las que para nada les seduce la idea. ¿Están condenadas a nunca vivir alguna aventura dentro de su misma ciudad? La respuesta es NO.

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Hay hoteles, como el Pug Seal, que son de primera categoría y que funcionan perfecto para esa escapadita romántica. ¿Por qué? Porque aunque es un Bed & Breakfast, es decir, aunque está pensado para que solamente duermas y desayunes ahí, la realidad es que ofrece un servicio de snacks 24/7 y las habitaciones –incluyendo las camas y sus mega televisiones, algunas colocadas detrás de espejos– son un verdadero deleite.

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Para predicar con el ejemplo, mi novio y yo nos hospedamos en el hotel que está en la esquina de Homero y Anatole France. ¡¡No te dejes engañar!! Parece casa, pero en realidad es un “hospitality boutique”, un concepto innovador en hotelería que une la privacidad y el servicio personalizado de un hotel de lujo con la intimidad y los detalles de un clásico B&B.

Aunque hay wifi sin costo, mi novio y yo optamos por apagar teléfonos y sólo disfrutar de la decoración (nos tomamos fotos en todos los espejos que había porque #YOLO), el piano del lobby (¡¡te dejan tocarlo!!), las obras de arte; pedimos UberEats y vimos algunas películas en Netflix y Amazon Prime. Pantuflas divertidas (sobre todo si eres fan de los pugs), batas suavecitas, una cena en nuestra terraza privada (dentro de la habitación) y café/té sin límite coronaron la experiencia.

Ni qué decir del desayuno del día siguiente: a la carta y ultra suculento. ¡¡Qué hermoso desayunar escuchando el cantar de los pajaritos!! Sin prisa y sin pausa…

¡¡Y qué rico también subir a la terraza principal para admirar el paisaje!! Sí, está lleno de casas y edificios gigantes, pero como dice el refrán: la belleza está en los ojos de quien la mira.

A veces lo que necesitamos las parejas en pleno ajetreo y estrés citadino es regalarnos 24 horas de conexión. En mi experiencia fue un día diferente, placentero y relajante.

Mi deseo es que te des el tiempo de vivir estas sensaciones, y sé que si eliges Pug Seal, tus expectativas no se quedarán cortas, ¡¡al contrario!! Así que anímate y reserva ya.