Muchas mujeres tienen dudas en cuanto a su cuerpo que afectan su desenvolvimiento en la vida diaria y de pareja. Y tú ¿qué tanto te amas? ¿Te has sentido de esta manera?
Nuestra sociedad tiene estándares que día a día son más exigentes. Los concursos de belleza, los videos musicales, las películas y telenovelas han propagado la idea de que la mujer debe ser sinónimo de perfección. En este prototipo no encajan kilos de más, celulitis, estrías, ojeras, busto o trasero pequeño.
¿Sabes cuál es la realidad? ¡Todas somos imperfectas!
Aprovecha tus fortalezas y sácales provecho. No te aflijas por lo que consideras te hace falta, los complejos son fantasmas que no te aportan nada. Explota tus atributos y ¡te verás hermosa!
Nada más atractivo que una mujer con actitud. ¡Brillarás con luz propia!
No desperdicies un momento íntimo por un ataque de inseguridad. Si llegaron hasta ese punto es porque le gustas, le atraes y quiere estar contigo. Pon en práctica los tips picantes que hemos dado en notas anteriores y ten por seguro que su atención no estará en ningún rollito extra. Además, independientemente de tu experiencia como diosa del sexo, ¡vales muchísimo! Él debe sentirse orgullo de tenerte a su lado.
Ningún hombre que se centre en tus debilidades para hacerte sentir menos merece tu compañía. Una cosa es que quiera ayudarte a mejorar, emprender una dieta juntos o regalarte ropa sexy para hacerte lucir hermosa. Otra, muy distinta, es que te juzgue o te ataque. ¡No lo permitas nunca!
Toma medidas. Si de plano hay cosas que no te laten, busca soluciones. Las quejas no te harán avanzar. Haz esa dieta que tu nutricionista preparó para ti, inscríbete en esa clase de spinning que has evadido, compra esa crema corporal que te recomendaron. Decídete a mejorar lo que te incomoda y ¡a amarte!
El amor propio es la llave para alcanzar la felicidad plena. Cuando aprendas a quererte, a aceptarte y a valorarte empezarás a sentirte plena. Jamás hubieses imaginado lo bien que puedes sentirte contigo misma.
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