Usar una mascarilla de chía con leche es una manera efectiva de hidratar la piel y de proporcionarle vitaminas y minerales importantes. La chía es una planta que se ha usado en medicina alternativa durante siglos. Es rica en omega-3, proteína, calcio, magnesio, zinc, vitamina E y ácido linoleico.

También ayuda a eliminar el exceso de grasa en la piel y a reducir las arrugas. Es un alimento rico en fibra, lo que ayuda a mejorar la digestión y a mantener una piel saludable. También ayuda a equilibrar la flora intestinal y a prevenir la inflamación en la piel.

En un estudio publicado en la revista «Dermatitis», se descubrió que las personas que usaron mascarillas de chía durante un período de 4 semanas experimentaron una reducción en la inflamación de la piel y una reducción en la aparición de acné.

Mascarilla de chía y leche para el rostro. Foto  cottonbro studio Pexels

Mascarilla de chía y leche para el rostro. Foto cottonbro studio Pexels

Mascarilla de chía para el pelo y la piel 

Una mascarilla de chía con leche es un remedio casero que se utiliza en cuidado de la piel y el cabello. Para hacerla, puedes seguir estos pasos:

  1. Mezcla 2 cucharadas de semillas de chía con 4 cucharadas de leche.
  2. Deja reposar la mezcla durante 15-20 minutos para que las semillas de chía absorban el líquido y se vuelvan gelatinosas.
  3. Aplica esta mezcla en tu rostro como una mascarilla facial o en tu cabello como una mascarilla capilar.
  4. Deja actuar durante 15-20 minutos.
  5. Lava bien con agua tibia.

La chía es rica en antioxidantes y ácidos grasos omega-3, lo que puede ayudar a hidratar y nutrir la piel y el cabello. La leche, por su parte, proporciona proteínas y vitaminas que también son estupendas.

Foto principal: Polina Kovaleva en Pexels


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