Cuerpos desnudos, besos, caricias, sudor, movimientos, sexo y más sexo. Todo sucede en la pantalla y tú del otro lado observando cada detalle de una película porno. Así es, muchas mujeres gozan al ver este tipo de cintas, ¿no lo crees? Sigue leyendo y ¡entérate!

Ratos de soledad

Unas mujeres cocinan, otras oyen música, algunas se ponen a leer un libro y otras más se toman una copa de vino en sus momentos de soledad. Pero existen muchas (aunque lo nieguen) que, ocupan esos momentos de estar a solas para autoexplorarse y lograr el ansiado orgasmo. Para conseguirlo, algunas buscan ciertos elementos que les brinden una “ayudadita” para excitarse, una de esas ayudas, sin duda, son las películas pornográficas.

Siendo honestas, la mayoría de las mujeres no acepta que gustan de este tipo de cine, piensan que sólo es aceptable para el público masculino. Pero ¡no!, a muchas les divierte, excita y prende este tipo de películas. Además, las mujeres somos aventureras y atrevidas, muchas aman ver este tipo de cintas “a escondidas” como en la oficina o restaurante, ya que les resulta más excitante saber que alguien las pueda cachar y eso hace que las disfruten más.

Despierta tu curiosidad

A lo mejor muchas no estarán de acuerdo, pero aquella mujer que diga que odia las películas pornográficas, miente. Ya sea por curiosidad, morbo o deseo, muchas caen en la tentación de verlas y las disfrutan. Algunas más atrevidas, invitan a su pareja a verlas con ellas y seguramente la película no llega a su fin, sin que hayan iniciado una larga sesión de besos y caricias que los lleve a un rico encuentro sexual.

Ver una película porno no es malo, al verla te liberas mientras te diviertes. Es totalmente respetable que a muchas no les guste este tipo de cine, pero el lado positivo de éstas son: además de la excitación que provocan por sí solas, la diversión va de la mano. Muchas parejas aman imitar lo que ven en ellas, el juego erótico, las posiciones y si te gusta lo rudo y salvaje, hasta el lenguaje que usan en ellas, los amarres, esposas y más lo puedes hacer. Sólo observa bien y hazlo.

¿Vemos una película?

Este tipo de películas, aunque lo duden, son buenísimas como terapia para una relación que está cayendo en el aburrimiento y la monotonía. Al hacerlo, le darás sabor a tus sesiones sexuales, se excitarán tanto que sus encuentros serán gloriosos. Interactuar mientras ves la cinta, te prenderá tanto, que llegará un momento en que olvidarán lo que ven y darán rienda suelta a su pasión y a todo aquello que deseen hacer.

Ahora, si ambos son bastante atrevidos y quieren darle un toque muy “hot” a su relación, proponle a tu pareja hacer su propio material porno, para esto sólo necesitarás de una cámara, una cama, sillón, sala o aquella locación que a ambos les guste y los protagonistas de la película, que serán ustedes dos. Esta experiencia será algo muy excitante y lo mejor es que si no queda alguna escena, la podrán repetir una y otra vez.

Cuando terminen de “filmar” su cinta y la vean, te aseguro que descubrirán nuevas formas de placer.

Sin duda,  hay muchas mujeres que no les gusta la pornografía, pero no me dejarán mentir, que todas tenemos ese toquecito de curiosidad que nos permite adentrarnos a ver y hacer cosas prohibidas que nos llevan a los más oscuro de nuestra imaginación y llegan a cumplir muchas de nuestras fantasías.

Rompe el tabú de que a las mujeres les molesta este tipo de cine y déjate envolver por el erotismo, el cachondeo y la pasión. ¿Te atreves? ¡Inténtalo!

Twitter: @angiegama

Angie Garcia Maldonado

¡Mucha suerte a todas!


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