El yoga es una disciplina que, además de relajar, ayuda a trabajar el cuerpo y la mente; es por eso que muchas personas suelen practicarla antes de dormir, para luego de una ducha, descansar plácidamente y sin interrupciones.
En paz con el yoga para dormir
Si tuviste un día ajetreado, lleno de estrés y no puedes conciliar el sueño, con estas posturas podrás hacerlo en cuestión de segundos:
- Sukhasana. Inclina tu cuerpo sin forzarlo, hasta donde puedas, estira las manos hacia adelante, o dóblalas y apóyalas sobre tu cabeza. Así aliviarás la tensión, abriendo tus caderas lentamente.
- Uttanasana. Colócate de pie, con los pies separados al ancho de tus caderas, dobla el tronco hacia el suelo y apoya las manos sobre él. Mejorarás tu dolor de cabeza e insomnio. Para liberar la tensión en las piernas, dobla tus rodillas lo más que puedas.
- Halasana. Acuéstate sobre tu espalda, levanta las piernas por encima de tu cabeza y hazlas tocar el suelo detrás de ti con los pies (si puedes, mantente durante un minuto). Así mejorarás el riego sanguíneo.
- Viparita Karani. Apoyada en una pared, sube las piernas para ayudar a que la sangre corra de nuevo hacia el corazón.
- Supta Baddha Konasana. Sobre tu cama o una esterilla, acuéstate y coloca los pies juntos, extendiendo la rodillas en la posición del diamante. Si la postura te incomoda, coloca una manta doblada o almohada debajo de las rodillas. Respira profundamente, y observa cómo tu respiración entra y sale de tu cuerpo, así estarás en modo reposo.
- Savasana. En la postura del cadáver, deja que tu cuerpo consiga el modo reposo. Centra tu atención en la respiración, en tu cuerpo, y evita pensar en las preocupaciones del día.
El yoga para dormir solo requiere unos 15 minutos.
Recomendaciones
- Establece un horario para dormir.
- Evita las siestas cercanas a la hora de ir a la cama.
- Diseña una habitación cómoda.
- Procura no ingerir comidas pesadas.
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