¡La naturaleza y sus maravillas! Además de todos los paisajes que nos regala, existen otros beneficios  para nuestro cuerpo, alma y mente.

Como ya sabemos, al estar en contacto con la naturaleza, nuestra salud se ve directamente beneficiada. Y es que su pureza nos renueva desde el alma hasta los pulmones, purificando el aire que respiramos.

Dar un paseíto por lugares llenos de vida natural reduce en gran porcentaje la secreción de hormonas del estrés.

Terry Hartig, profesor de psicología en la Universidad de Upsala (Suecia), ha demostrado que después de una excursión de 40 minutos por la naturaleza se agudizan las habilidades intelectuales.

4 regalos de la naturaleza que damos por hecho

  • La naturaleza nos acepta tal y como somos: cuando hablamos de naturaleza, nos referimos a: animales, plantas, tierra, cielo, paisaje, lluvia, sol, nubes, etc… y todas ellas te aceptan sin quitarte ni agregarte nada.

Ya con esta razón, tienes la inigualable oportunidad de que tu relación “naturaleza y yo” sea de paz, amor y aceptación mutua.

  • ¡Sensación de libertad!: al verte rodeada por árboles, animales y plantas, sientes esa liberación y autonomía que en otro lado quizás, no consigas.

En este punto, automáticamente, el aspecto psicológico fluye y se adapta a todo lo positivo que estás viviendo en ese momento, llenándote de paz, felicidad y seguridad en ti misma.

  • Inspiración: que la naturaleza sea tu musa. Indiscutiblemente la naturaleza te nutre y reafirma pensamientos. Estimula y nos aleja del pensamiento de las convenciones, liberando la creatividad.

Esta teoría la afirman los psicólogos Paul y Ruth Ann Atchley, de la Universidad de Kansas, quienes aconsejan que es muy provechoso recurrir con frecuencia a sitios inundados de naturaleza pura.

  • Reconciliación con nuestro “yo interno”: durante episodios diarios, sentimos rabia por cosas que no salen como esperamos y optamos por culparnos y auto señalarnos.

Caminar un fin de semana por una montaña y ver caer la cascada te ayuda a reconciliarte contigo misma, equilibrando tu cuerpo, tu mente y tu alma de todos esos cuestionamientos que a veces atormentan.

El mejor momento para buscarle solución a las cosas y sanarte de todo sentimiento que te aleja de las vibraciones positivas es el ahora.

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