En momento de pausar y reposar nuestra mente de nuestros teléfonos móviles, tabletas y computadoras, ¿sabes cómo? Aquí te compartimos 7 pasos para lograr un detox digital.
Resulta que ahora estamos súper conectadas a nuestras herramientas digitales y aunque la tecnología tiene sus beneficios, hay otro lado de la historia que afecta nuestra salud y calidad de vida.
Desde la calidad de sueño hasta los niveles de productividad, se podrían ver afectados si no damos una pausa y reiniciamos nuestra mente y cuerpo. Para esto, es necesario un detox.
¿Sabes qué es un detox?
“Una desintoxicación digital es un período de tiempo intencional sin usar tecnología digital (es decir, sin uso de Internet, redes sociales, correo electrónico, etc.)”, comenta la experta en desintoxicación digital Tanya Goodin, fundadora de Time To Log Off y autora de Mi Mente Tiene demasiadas pestañas abiertas.
Además, explica que “es un momento para conectarse con el mundo fuera de tu celular, para descansar, aclarar tu mente, volver a conectar con amigos y familiares, y tal vez realizar algunas de tus actividades favoritas de siempre”.
¿Por qué deberías probar una desintoxicación tecnológica?
La experta lo aclara:
“Constantemente, las personas hablan de experimentar una mejor calidad de sueño, fortalecer sus relaciones más cercanas, pasar tiempo al aire libre en la naturaleza y participar en pasatiempos e intereses que los hacen sentir más saludables y felices”, señala Goodin.
También dijo: “tomar un descanso de estar permanentemente ‘encendido’, le da a nuestro cerebro el tiempo de inactividad que necesita de la estimulación constante para funcionar correctamente. Algunas personas incluso han descubierto que las desintoxicaciones digitales periódicas, las han vuelto más creativas al darles un poco del ‘espacio mental’ que se necesita para la resolución de problemas y la creatividad».
¡Detox digital!, consejos para empezar
“Puede ser a primera hora de la mañana o no usar dispositivos electrónicos durante todo un fin de semana, te ayuda a reconectar contigo mismo y con las personas en la vida real”, menciona la psicoterapeuta Kimberly Hershenson.
Establece límites y horarios: Paso 1
“Coloca límites claros para los lugares y momentos en los que usas tu teléfono, como ‘no enviar correos electrónicos después de las 8 pm’, ‘no usar celulares en la recámara y/o revisar redes sociales después de la medianoche’, indica Goodin.
Designa tiempos de concentración: Paso 2
“Intenta poner tu teléfono en modo avión o déjalo en otra habitación mientras estás con otras personas, solo unas pocas horas sin el teléfono y la necesidad constante de revisarlo pueden ayudarte a romper con la costumbre”, sugiere la Dra. Hershenson.
Desactivar las notificaciones: Paso 3
Afortunadamente, algunas compañías telefónicas han creado funciones que te permiten poner tus dispositivos conectados en modo «no molestar» y te ayudan a establecer límites. Si tienes acceso a esta función, inténtalo.
No escuchar los sonidos de las notificaciones a cada instante ayuda a reducir el estrés mental y te hace ser más consciente del día y el momento.
Pon tu dispositivo en un cajón durante el tiempo de calidad: Paso 4
Todos queremos estar presentes y prestar toda nuestra atención a nuestros amigos y familiares cuando pasamos tiempo de calidad, sin embargo, nuestros dispositivos pueden ser una distracción.
“Crea reglas en torno a eventos o lugares, y hazlas cumplir con cada miembro de la familia o invitado. Por ejemplo, si traes tus dispositivos a la mesa, no los saques de tu bolsillo cuando te encuentres cenando con amigos», recomiendan los expertos en el tema.
Del mismo modo, puntualiza que si tienes noches de cine en familia, los teléfonos y tabletas deben permanecer en las habitaciones. El descanso puede parecer una pelea al principio, pero pronto todos apreciarán la oportunidad de separarse de los dispositivos.
Deja tu teléfono en un lugar seguro mientras haces otras actividades: Paso 5
“Acostúmbrate a salir a caminar, ir al gimnasio o simplemente ir de compras sin tu teléfono”, señala Goodin.
Ella expone que hacer esto, te brinda un rápido descanso tecnológico y te permite concentrarte en la tarea en cuestión.
Elige un par de días a la semana para no despertarte con tu teléfono: Paso 6
Si lo primero que buscas es tu teléfono, rompe el hábito dejándolo en otra habitación cuando te acuestes. Lo recomendable es invertir en un despertador y no tocar el teléfono durante la primera hora después de despertarse.
Asimismo, explica que si una hora parece demasiado larga, puedes comenzar con 15 minutos y aumentar gradualmente. Puedes probarlo solo los fines de semana y permítete dormir hasta tarde si eso funciona para ti.
Recompénsate: Paso 7
“Cada día, tómate una hora de ‘tu tiempo, consiéntete con una salida o un café de tu lugar favorito”, comenta la Dra. Hershenson.
Prueba estos consejos poco a poco hasta que se hagan costumbre. Notarás que te encuentras menos cansada y lograrás hacer más actividades durante el día.
Fuente: Fitbit
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