Hoy quiero hablarte de un tema que puede ser más común de lo que imaginamos: el gaslighting. Si alguna vez te has sentido confundido acerca de tus pensamientos o emociones debido a lo que alguien más dice o hace, es posible que estés experimentando este tipo de manipulación psicológica. Vamos a desglosar qué es, cómo reconocerlo y, lo más importante, cómo enfrentarlo.
¿Qué es el gaslighting?
Es una forma de manipulación en la que una persona intenta hacer que otra dude de su propia realidad, memoria o percepción. El término proviene de una obra de teatro llamada «Gas Light» en la que un esposo manipula a su esposa para que crea que está perdiendo la cordura. En la vida real, esto puede manifestarse de muchas formas: desde desmentir algo que claramente sucedió hasta hacer comentarios despectivos sobre tu memoria o emociones.
Señales y alertas
Reconocer el gaslighting puede ser complicado, especialmente porque a menudo se siente sutil en el momento. Pero aquí hay algunas señales que pueden ayudarte a identificarlo:
- Dudas constantes. Si te encuentras cuestionando tu propia memoria o percepción de eventos porque alguien te dice que no fue así, ten cuidado.
- Minimización. Cuando compartes tus sentimientos o experiencias y el otro los reduce a algo trivial, como «No es para tanto» o «Tú siempre exageras», esto puede ser un signo de gaslighting.
- Confusión frecuente. Si sientes que estás caminando sobre cáscaras de huevo, tratando de evitar discusiones para no provocar la ira de alguien, eso puede ser una señal de manipulación.
- Aislamiento. A veces, las personas que hacen gaslighting intentan alejarte de amigos y familiares. Si notas que alguien está tratando de socavar tus relaciones, presta atención.
- Cambio de narrativa. Si alguien constantemente cambia la historia o niega eventos pasados para hacerte sentir que tú eres el problema, ¡alarma!
¿Cómo hacerle frente al gaslighting?
Ahora que sabemos cómo reconocer el gaslighting, hablemos de cómo enfrentarlo:
- Confía en ti misma. Este es el paso más importante. Mantén un diario donde anotes tus recuerdos y experiencias. Esto te ayudará a reafirmar tu propia realidad.
- Habla con alguien de confianza. Compartir tus experiencias con amigos o familiares puede ofrecerte una perspectiva externa. Ellos pueden ayudarte a ver si lo que estás viviendo es realmente gaslighting.
- Establece límites. Si identificas a alguien que está manipulando tu percepción, establece límites claros. Diles que sus palabras o acciones te afectan y que no estás dispuesto(a) a tolerarlo.
- Busca ayuda profesional. Hablar con un terapeuta puede ser muy útil. Ellos tienen herramientas para ayudarte a reconstruir tu confianza y autenticidad.
- Prepárate para dejar la relación. Si el gaslighting persiste y se convierte en una parte integral de una relación, es esencial considerar si vale la pena seguir en ella. Tu bienestar mental es lo primero.ç
Reflexión final
El gaslighting es una experiencia desgastante y dolorosa, pero saber cómo reconocerlo y enfrentarlo es el primer paso hacia la sanación. Recuerda que tus sentimientos son válidos y tu realidad es tuya. No permitas que nadie te haga dudar de ello. Al final del día, mereces relaciones saludables y respetuosas.
Si sientes que se te hace casi imposible manejar esto, busca apoyo y liberate de ese yugo piscológico. Cuídate, tu bienestar es lo primero.
Foto principal: Pinterest
Mira este post: Un nuevo yo en 30 días: El poder de la visualización en casa
Síguenos en redes sociales como @KENArevista: