Después de meses de especulación, hoy la marca americana Calvin Klein finalmente dio a conocer que Raf Simons será su director creativo, después de la salida de Francisco Costa e Italo Zucchelli previamente anunciada en abril de este año. El contrato de “non-compete” que Simons tenía con Dior se venció a finales de julio de este año, por lo que no sorprende que hoy la marca, a través de sus redes sociales, anunciara que Simons tendrá el control absoluto de la creatividad de Calvin Klein. Esto quiere decir que Simons se encargará de las colecciones en todos los niveles de la firma, incluso en el mercadeo.

Ralph Simons Foto: Interview Magazine

Ralph Simons Foto: Interview Magazine

Lo mencionado viene de sorpresa, porque desde hace 14 años, cuando Klein y su socio Schwartz vendieron la compañía al conglomerado PVH, la marca ha dividido sus diferentes sub-marcas y direcciones creativas en departamentos separados. De hecho, los ejecutivos declararon a los medios que los shows de runway manejados por Costa y Zucchelli no eran más que herramientas de mercadeo para mantener el prestigio de la firma, mientras que el grueso del dinero lo generaban las sub-marcas mucho menos costosas de Calvin Klein (CK accesorios, ropa intima, etc.).

Calvin Klein

El cambio radical en el manejo de lo creativo, del mercadeo y de la producción puede ser riesgoso en una marca que nunca ha sufrido percances en sus ingresos. De hecho, el año pasado generó ventas por 8.2 millones de dólares y se ha mantenido joven con campañas como #MyCalvins, donde modeló Justin Bieber, dándole continuidad al concepto de mercadeo usando pop-stars, que en sus inicios generó el furor por la marca. (No olvidemos a Brooke Shields hablando de que no existía nada entre su piel y sus jeans Calvin Klein).

Justin-Bieber-Calvin-Klein-L

Por lo mismo, nos preguntamos: ¿por qué tomar una dirección tan radical si todo se ha mantenido bien? En lo personal, creo que el nuevo CEO de Calvin Klein, Steve Schiffman, entendió que existe cierta atrofia en la creatividad de la marca. Que, internamente, esta y sus sub-marcas están muy desconectadas, y que tiene un potencial enorme para convertirse en una marca sólida e histórica que puede ir más allá de lo meramente comercial, generando pautas, tendencias, con presencia para participar con su propio tono en la conversación de la moda.

Por esto el nombramiento de Simons, quien esta en su mejor momento como profesional, tiene todo el sentido del mundo. El hombre que trajo color a Jill Sanders y logró mejorar las ventas de Dior en un 60% en tres años, es ideal para llevar a una de las marcas más destacadas en América a ser un power player en el mundo. Junto con su mano derecha, Pieter Mulier, Simons tendrá una libertad creativa donde podrá moldear la identidad de esta marca sin sucumbir a la presión de generar seis colecciones anuales, con el embotamiento dentro de círculos de reciclaje creativos que le dejaban poco tiempo para experimentar, pensar e innovar.

1980-esq-calvin-klein-campaigns-brooke-shields-1980_1

En lo personal, siento que este anuncio es histórico: uno de los mejores diseñadores de nuestra era ha cruzado el océano para elevar el estatus creativo y comercial de una de las marcas más importantes de nuestro continente. La unión Simons-Klein no es más que dos oposiciones encontrándose para crea una visión diferente en el diseño de una marca ya establecida, en un año en que la industria se ha caracterizado por cambios drásticos.

Por cierto, de inmediato la autoridad de Simons se hace sentir en la foto donde la marca anuncia su llegada como director creativo. En esta el protagonista usa una camisa de su propia colección (no una de Calvin Klein) con un cuadro de fondo un poco peculiar en la estética del anuncio.

Ralph Simons en Calvin Klein2

 


Síguenos en redes sociales como @KENArevista: