A veces nos topamos con irritaciones, escamitas y hasta hongos en la piel de nuestros pequeños.
Su piel es muy sensible y delicada, pues se está acostumbrando a vivir en un ambiente diferente. Al nacer tiene un pH neutro que se va volviendo ácido. La piel es más delgada (hasta un 30% más que la de un adulto) y en muchos casos, tienen alta producción de sebo debido a la carga hormonal que trae de la madre.
Algo que no se habla mucho es que la microbiota cutánea no se ha desarrollado aún de manera total y es importante porque son microorganismos que la protegen.
Los padecimientos más recurrentes en los bebés son:
- Dermatitis atópica o eccema: la piel está irritada, enrojecida, seca y puede generar comezón. Se pueden aliviar los síntomas con cremas especiales.
- Dermatitis seborreica del lactante (conocida como costra láctea): es un exceso de grasa en el cuero cabelludo que genera escamas o parches de rojeces. Generalmente no requiere de tratamiento pero sí de lavado diario del cabello.
- Dermatitis del pañal: es cuando tienen la piel muy roja de la zona del pañal y se debe al contacto que tiene con la humedad y sustancias irritantes (la orina y las heces). Para la dermatitis del pañal lo más recomendable es no dejar al pequeño mucho tiempo con el pañal, limpiar bien la zona evitando toallas húmedas con alcohol o fragancias, dejar secar y aplicar una capita de Vitacilina Bebé. Puedes reaplicar y no es necesario retirar por completo la capa anterior, durante el baño con agua tibia podrás limpiar completamente.
Ojo: no siempre se necesita acudir al pediatra, aunque si los problemas persisten, sí hay que hacerlo.
Evita: rascar o que se rasque, no tallar la piel.
No olvides que Vitacilina Bebé te acompaña en esta mágica etapa de sus vidas y es muy buena para su piel. Por ejemplo, la Vitamina A favorece a la regeneración celular, mantiene la piel sana y contribuye a que se sane la dañada. ¡Y qué decir de la Vitamina E!, que es un atioxidante que protege células y tejidos del daño que podrían causar los radicales libres. La alantoína calma y defiende la piel de la irritación cuando hay alguna lesión como ulceraciones, quemaduras o rozaduras.
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