No somos perfectas y precisamente por eso, es mejor asumir y decirlo ¡es un poco complejo ser disciplinada! El día a día a veces agota y limita a seguir todos esos requisitos para serlo.
Un estudio de la Universidad de Essex en Inglaterra demostró que las niñas cuyas madres eran estrictas con horarios, deberes, etc, fueron más exitosas que los niñas con mamás menos exigentes.