Por Ana Pazos Y después de más de dos meses en donde el mundo se paralizó, todo cambió. Sí, cambiaron nuestros hábitos, la manera de trabajar, de organizar nuestro tiempo, nuestra forma de socializar, de ver la vida desde otro…
El peor enemigo de la organización y el orden no son nuestros hijos cuando llegan en tropel y arrasan con el refri, lanzan los zapatos al aire y se derrumban sobre el sofá provocando un caos entre los cojines que…