
Fomentar un noviazgo sano en la adolescencia es determinante para evitar que nuestros hijos se expongan a heridas emocionales o situaciones que les dejen una huella emocional negativa.
Hay que recordar que esta etapa está marcada por grandes cambios y transiciones que inciden en el desarrollo de la propia identidad. Por lo tanto, las primeras relaciones amorosas acaban afectando más de lo pensado.
En este momento de la vida las emociones se encuentran a flor de piel y se viven de manera intensa. Así, el primer amor puede parecer el único y muchas cosas empiezan a girar en torno a este. Si bien es de lo más normal, como padres es importante orientar y supervisar para que la experiencia no se torne desagradable o peligrosa.
“En la adolescencia comenzamos a tener relaciones de noviazgo, la inexperiencia puede dar pie a conductas como celos, reclamos y control de la pareja que son formas de violencia. Es importante identificar estas conductas y no justificarlas porque lo más probable es que vayan cada vez en aumento. Aunque la inexperiencia o falta de conocimiento puedan ser la razón de ser de estas conductas, eso no justifica llevarlas a cabo,» comentó Elisa Furlong, especialista en desarrollo familiar y terapia de pareja.
Como padres, podemos fomentar una comunicación más cercana con nuestros hijos para identificar estas actitudes, y en caso que lo creas necesario, también puedes acercarte con un experto que te ayude a afrontar esta etapa de la mejor manera.

Noviazgo sano, una charla oportuna con nuestros adolescentes. Foto: vadimphoto1 en Depositphoto
4 tips para fomentar un noviazgo sano
1- Potencia la autoestima y la dignidad
Estos elementos pueden convertirse en los mejores aliados de tus hijos cuando inician su vida afectiva. Un joven que posea una autoestima sana y fuerte será capaz de elegir parejas que le nutran, le respeten y le eleven.
Pero no solo eso, también podrá percibir con claridad cuándo un vínculo ya establecido no está cumpliendo unos mínimos estándares de afecto y buenos tratos, y tendrá menos dificultades para ponerle fin.
2- Ofrécele una buena educación emocional
3- Enséñales la importancia de la asertividad
4- Trata de comprenderlos, no de juzgarlos
Fuente: Elisa Furlong Parenting Coach,
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