El término terapia se aplica en diferentes ámbitos. A nivel de medicina hace referencia a intervenciones diseñadas para tratar enfermedades y mejorar la salud y bienestar del paciente.

Entre los tipos de terapias se encuentran: cognitivo-conductual, sistémica, lenguaje, ocupacional, psicoanalítica, entre otras.

Estas son herramienta que se utilizan como una forma de recibir ayuda ante un problema, una discapacidad o situación en particular.

¿Para qué sirve una terapia?

Contrario a lo que muchos piensan, asistir a terapia con un psicólogo no es sinónimo de debilidad, esto es una opción disponible y al alcance de todos para tratar problemas de manera diferente.

Generalmente las terapias aportan herramientas que ayudan a mejorar las situaciones difíciles que se presentan en el día a día. Además, ayuda a que la persona se sienta mejor y con ello mejora el bienestar. También permite vivir en armonía y a conocerse mejor.

¿Por qué funciona?

Si crees que necesitas alguna terapia, porque no logras controlar las emociones, tienes problemas para conciliar el sueño, o no te sientes bien contigo mismo, por ejemplo, no dudes en pedir ayuda con el especialista indicado, éstas:

– Te permiten darte cuenta de las diferentes realidades de tu vida.

– Son un espacio para ser escuchado y permitirte sanar.

– Ofrecen un espacio seguro donde poder hablar libremente.

– Ayudan a conectar con las emociones.

– Se convierten en un espacio de autoconocimiento.

– Mejora la calidad de vida.

– Aumenta la relajación y las emociones positivas.

– Permite que las personas se sientan motivadas, valientes y esperanzadas.

– Cambia patrones de comportamiento.

– Refuerza la autoestima.

– Descubre talentos ocultos.

– Resuelven conflictos.

– Supera traumas.



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