Mucho se ha dicho sobre intencionar las metas y pequeñas acciones para lograr lo que deseas, para configurar tus pensamientos y poder ser lo que deseas. Casi no se ve que intencionar tu agua todas las mañanas puede traer beneficios increíbles para tu salud física, mental y espiritual.
¿Cómo ponerle intención?
Esta agua es lo primero que vas a tomar en tus mañanas. Puede ser la que usas para el café, el té o cualquier bebida. La intencionas, la transformas y luego la bebes haciendo de esto tu nuevo ritual de la mañana.
Foto de Melissa Walker Horn en unsplash
¿Qué debo decirle a mi agua?
Lo mejor será llenarla de toda esa energía y ese mood que deseas para el día. Dile todo lo que deseas hacer y cómo quieres que te salgan las cosas. Cuéntale tus sueños y tus metas, tus objetivos y de ésa reunión del trabajo donde esperas que todo salga bien. Afirma que este día todo estará a tu favor.
Foto de Helio Dilolwa en unsplash
Ahora te la tomas y todo eso entra en ti. No sale y queda plasmado en el papel (que también es efectivo) sino que vuelve y te acompaña el resto del día hasta que, en el siguiente lo intenciones nuevamente con algo más.
Foto de Julia Zolotoa en unsplash
Intencionar tu agua
Puede tener efectos positivos en ti si crees en ello, puesto que tú creas tu realidad y este es, simplemente un medio para lograrlo y mantener esa actitud que necesitas para llegar hasta donde quieres llegar a ser.
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¿Ya lo has intentado?
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