Cuesta tanto poner límites… ¿te ha pasado? Aguantas y aguantas todo de una persona que te importa y no sabes decir ¡alto! ¿Esto podría traer consecuencias?

Es una situación desagradable, desesperante y angustiante. Solo con el hecho de no querer soportar más, dices que por respeto y amor, prefieres seguir viviendo encadenada a un falso, lleno de temor e inseguridades… Esto es una cadena que debes romper.

¿Qué ha pasado todo este tiempo donde no te has atrevido a poner el límite?  Sientes que el mundo va en reversa, que todo está en tu contra e inevitablemente, volverá a suceder eso que tanto te desgasta.

¿Los límites son necesarios?

Por supuesto. Con esto forjaremos nuestra identidad y carácter. Además, aprendemos qué sí y qué no vamos a tolerar, poniéndonos a nosotras en primer lugar. Te valoras y le das sentido a ese famoso amor propio del que tanto hablamos.

Recuerda que tu interior es el reflejo de tu exterior. En este sentido, para curar emociones:  aléjate de una persona si consideras que es tóxica;  di con seguridad ¡NO!, si no quieres ir a ese lugar pues no vayas, no permitas que te revisen tus cosas personales… simplemente, no hacerlo que no quieres.

¿Qué pasa cuando no ponemos límites?

  1. Siempre decimos que sí, aunque no queramos
  2. Seguimos al lado de personas que no reconocen nuestro valor
  3. No respetan nuestro espacio (dormir, celular, llamadas, amigos, salidas. Etc) y no hacemos nada respecto a esto
  4. Toman decisiones por nosotras
  5. Maltrato verbal y físico
  6. Manipulación
  7. Controlan nuestro tiempo
  8. Hacemos lo que otros digan
  9. Aceptamos acciones inadecuadas.

Pero siendo honestas, ¿quién está permitiendo esto? Nosotras mismas. Si nosotras no nos damos nuestro lugar, nadie lo hará.

Estás a tiempo de actuar porque si le sigues dando largas, tu autoestima se verá directamente afectada. Hazte valer, sentir y respetar y no seas la misma mujer insegura, con miedo, dependiente de otros… ¡Ya no más, pon tus límites!



LEER MÁS SOBRE ¡ESAS SON COSAS DE MUJERES NO DE HOMBRES!


Síguenos en redes sociales como @KENArevista: