Se dice que las mujeres somos complejas en nuestras relaciones, porque somos sensibles, porque somos intensas; pero perdemos de vista que culturalmente y por años se nos ha enseñado una sola manera de ser y de hacer amigas: tener una mejor amiga y para siempre.

Y es verdad que las amigas hoy se han vuelto parte de nuestras vidas y son un gran soporte y están con nosotras en las buenas, en las malas y en las peores… pero siempre está esa espinita incómoda de «tener una mejor amiga» y de que esa amistad sea eterna. Perdemos de vista que en la vida real, más allá de nuestra naturaleza femenina, somos personas y en la experiencia humana el cambio es la constante y si nosotras cambiamos, ¿por qué deberíamos conservar la misma amiga por los siglos de los siglos?, es ilógico.

Entonces resulta mentiroso creer que la amistad es para siempre y nos vamos confundiendo en el camino por sostener a toda costa esa verdad a medias. Cuando finalmente la realidad nos alcanza y nos damos cuenta que hay amistades que se pierden, se terminan, se desgastan o cambian… se da un duelo bien difícil de superar porque simplemente no estamos preparadas para perder a la amiga.

Ahora, también hay que reconocer que las relaciones femeninas están rodeadas de muchos mitos que aún tienen fuerza: «mujeres juntas ni difuntas»; «las mujeres no son leales entre ellas porque compiten», «es más fácil tener amigos hombres que mujeres», etc., y tampoco es cierto.

Hay amistades leales, incondicionales, genuinas y duraderas entre mujeres. Las mujeres sabemos hacer equipo con otras mujeres porque sabemos que juntas somos más fuertes. También sabemos trabajar juntas, resolver conflictos, superarlos y reconocer el éxito, la fortaleza, la belleza y muchas otras cualidades y habilidades en las demás.

El reto está en reconocer que NO tenemos que tener una media naranja por amiga; que tampoco tenemos que ser amigas de nuestras iguales -a veces la diferencia de personalidades e intereses es lo que fortalece la amistad-, que no todas las mujeres cercanas a nosotras realmente son nuestras amigas; y que siempre cabe la posibilidad de que la amistad cambie o se termine y también de hacer nuevas amigas.

Asimilar lo anterior no significa que no duela enojarnos y hasta perder a la amiga, aquella que pensamos que estaría para siempre; lo que cambia es sólo la medida que le damos a las emociones alrededor de la amistad y eso puede, incluso, hacerla más fuerte y genuina porque entonces seremos más objetivas y menos románticas respecto a nuestras amigas.

Pues de este gran tema se trata «¿Amigas para siempre?» (Planeta), de Claire Cohen, dando respuesta a las preguntas cruciales acerca de la amistad entre mujeres: ¿la amistad es para siempre?, ¿tengo que tener una mejor amiga?, ¿por qué me duele tanto haber terminado nuestra amistad?, ¿existe la fórmula para ser buena amiga?, ¿hay amistades tóxicas?, ¿todas las mujeres que conozco son mis amigas?, ¿se pueden hacer nuevas amigas?…

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«Mejores amigas por siempre», «enemigas», «tóxicas», y tantos otros clichés de la amistad entre mujeres, son analizados en este estudio completísimo que te permitirá no solo manejar una ruptura, sino analizar la realidad de tus relaciones y, sobre todo, te abrirá los ojos acerca de lo que necesitas para ser una mejor amiga, procurar a las que tienes y encontrar en esas amistades lo que te hace bien como persona.

Cortar con tu mejor amiga es un sufrimiento del que poco se habla, pero puede ser tan doloroso como ter­minar una relación romántica: «Si éramos tan unidas, ¿qué fue lo que salió mal?, ¿fue ella o fui yo?»  

Quizá el problema es que las amistades entre mujeres se han construido entre mitos. Nos hacen creer que no debería­mos valorar las conexiones que hay entre nosotras y nos man­tienen persiguiendo una idea de amistad perfecta que se ve más como una novela o una comedia.

¿Amigas para siempre? cuestiona esas creencias tóxicas sobre nuestros vínculos, habla sobre la búsqueda de la supues­ta «alma gemela», explica por qué es válido terminar con tu mejor amiga (¡pero no ghostear!) y enlista los distintos tipos de relaciones que descubrirás a lo largo de tu vida. Las amistades a prueba y error son parte de crecer; esta es una guía que te ayudará a sortear el camino. Definitivo Kena recomienda, ya lo encuentras en todas la librerías, venta en línea y en formato ebook.

Claire Cohen es una periodista galardonada, nombrada editora del año por la British Society of Magazine Editors por su activismo y sus artículos con conciencia social. Conduce los podcast BFF e Imposters. También participa regularmente como comentarista de medios, además de ser una experimentada conferencista. Claire ha escrito para diferentes publicaciones, incluyendo The Times, GuardianTelegraph y Vogue, y es una orgullosa socia fundadora de la Ginsburg Women’s Health Board. Vive en el sur de Londres con su esposo y su gatito. ¿Amigas para siempre? Ruptura, mitos y realidades de la amistad entre nosotras es su primer libro, puedes checar su perfil en IG https://www.instagram.com/clairecohen1/?hl=es

La verdad es un regalo de vida poder desenmarañar tanto conflicto inventado alrededor de las mujeres amigas, ver todo más desde el centro y de la realidad humana, y menos desde el drama y el desgaste que a veces se siente como si hubieras dejado a tu ex, o como si fuera un tema intocable.

Yo amo a mis amigas, sé que cuento con ellas y ellas cuentan conmigo, pero ya no hay pactos de sangre para la eternidad, solo un gozo genuino en donde nos vemos, nos reconocemos y nos amamos sin filtros y sin condiciones.

Un Abrazo,

Karla Lara

Foto de Lookstudio en Freepik


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