¿Te da miedo hacer compras online? ¿Crees que te van a defraudar o eres una súper experta? En caso de ser de las desconfiadas, aquí te dejamos las reglas infalibles para comprar online.
Conviértete en una profesional del internet shopping
Compra en sitios confiables. Esto parecería lo más lógico, pero la verdad es que en Instagram y Facebook hay muchos anuncios con vestidos y zapatos increíbles a precios muy atractivos. Así que como no son «tan caros», les damos una oportunidad sin tener realmente referencias. Por eso es mejor buscar sitios que tengan garantía y una buena reputación.
Compara precios. La maravilla de comprar online o por internet es que puedes comparar sin pararte de tu lugar. ¿Un vuelo? Métete a Volaris, Viva Aerobús, Interjet, Aeroméxico y busca. O bien, utilizar los portales que lo hacen por ti como Despegar, Jetcost o Kayak. Pero también aplica a cualquier otro producto.
Aprovecha las ofertas. Para sacarle el mejor provecho a tu inversión, ya que sabes qué producto quieres (y el precio), espera al Prime Day de Amazon, Ciber Monday o hasta El Buen Fin (¡sin encontrarte con el terrible gentío!). Insistimos: asegúrate del precio, ya sabemos que en tiendas aumentan el monto para «la oferta». ¡No te dejes engañar!
Imagen de PublicDomainPictures en Pixabay
Lee reseñas y referencias. Si el sitio web no las ofrece en sí, busca en sus redes sociales. Hablamos tanto de la tienda como del producto en sí. Sitios como Amazon o Shein muestran las reseñas de muchos de sus productos, lo que se convierte en tu guía máxima. Suena a una monserga pero te ayudará a decidir si es el artículo que realmente estás buscando. Hay reseñas que exploran hasta la transparencia de la tela, ¡mejor invertir tiempo en leer que en devolver la prenda! Un ejemplo:
Imagen tomada como referencia en Amazon
Verifica que sea un sitio confiable. Las tiendas «aseguradas» cuentan con SSL (secure sockets layer). Esto puedes verlo en la dirección: httpS://ladirecciondecompras.com Esa S significa que es un sitio confiable para comprar.
Conoce las tablas de medidas. ¿Cómo saber si te va a quedar bien? Mmmmm… no hay garantía. Por eso, es muy importante que leas con atención las tablas de medidas y los comentarios (como el de Amazon que está arriba). También es una buena idea que si existe tienda física, vayas a conocer las tallas. ¿Un ejemplo? Nine West tiene hormas muy amplias, por lo que es probable que necesites un número más pequeño.
Dale oportunidad a los nuevos. Existen pequeños productores artesanales (o no) que no pueden costearse una tienda online, así que se han creado opciones de venta para ellos. Por ejemplo, Canasta Rosa es un espacio de diversas tienditas locales, todas verificadas y confiables, en donde puedes adquirir monísimos productos hechos a mano y con entrega garantizada. ¿Así o más cool?
Investiga las políticas de envío y devolución. Una cosa es que el sitio sea seguro y otra que te vaya a satisfacer el producto. Así que, primero, ve en cuánto tiempo te va a llegar. Webs como AliExpress tienen joyas… que podrían tardar MESES en llegarte. La paciencia será tu mejor amiga. Pero también, si no te queda bien la prenda o no es lo que esperabas, ve cómo se puede devolver el producto (y tu dinero) antes de darle al botón de carrito de compras. Más vale.
¿Te sientes más cómoda pagando por medio de un tercero? Utiliza sitios como PayPal que son un proveedor de pagos. ¿Cómo funciona? Abres una cuenta con ellos y sólo ahí pones los datos de tu tarjeta. Si la tienda donde quieres comprar ofrecen este método de pago, lo eliges, te logeas y aceptas el monto. Esta marca también tiene garantía de compra, así que te sientes doblemente protegida. Claro, no en todos lados existe.
Compra en casa. Evita poner tus datos personales (y bancarios) en una computadora que no es tuya. No sabes qué tipo de mañas vayan a tener los que administran el ciber café o quien la use después que tú.
¿Qué hay de Facebook? En todos los grupos venden algo y qué decir si te metes al market. ¡Hay de tooooodo!, nuevo y usado. Ahí sí no hay garantía, tendrás que confiar en el feeling que te da el vendedor.
No te asustes, suena más complicado de lo que realmente es. Una vez que te familiarizas, ¡serás toda una profesional! Conocemos gente que ya ni al súper se para, ¡ni por papel de baño! ¿Te animas?
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