En entrevista exclusiva para Kena la actriz Dominika Paleta nos da su opinión sobre el tema del maíz transgénico.

Recordemos que el pasado 8 de marzo un magistrado federal ratificó la suspensión de siembra de maíz transgénico, debido a que las empresas no pudieron comprobar que son inocuos y seguros para el medio ambiente. Esta suspensión está vigente mientras se desarrolla el juicio de acción colectiva que presentó La Colectividad del Maíz, integrada por la comunidad campesina, científica y sociedad civil, hace casi tres años.

Aunque Dominika Paleta no está trabajando bajo ninguna campaña, la actriz confesa aberrante que exista el maíz transgénico como parte de la alimentación.

Me parece aberrante y terrible que sigamos sin darnos cuenta de lo malo que eso significa. La nutrióloga Julieta Ponce, hizo toda una investigación sobre cómo puede afectar esto. Es bien difícil hablar de esto, es un tema en el que estoy en contra y he firmado muchas peticiones. Tendríamos que despertarnos como mamás, seguimos creyendo lo que dice el gobierno y hay muchos intereses de por medio. Creo que es importante que no nos traguemos las cosas sin digerirlas nosotros primero. Si le dejamos la nutrición en manos de gente que tiene intereses monetarios y poca ética, también hay que ver en qué manos estamos.”

Según Greenpeace 

¿Qué significa la suspensión?

1.- NO se puede sembrar maíz transgénico en México para su comercialización. O sea, no es maíz que pueda ser vendido ni comprado por empresas.

2.- Las autoridades NO pueden dar permisos para siembras comerciales.

3.- Se ponen candados a las siembras en fase experimental y piloto.

¿Por qué es una buena noticia para nosotros?

Que un magistrado federal ratificara la suspensión de siembras de maíz transgénico a escala comercial, es darle la razón a la sociedad civil sobre las empresas.

El fallo detiene las intenciones de las trasnacionales para sembrar maíz transgénico a gran escala en México.

Las compañías trasnacionales NO han podido demostrar que los transgénicos sean seguros para la salud de las personas y el medio ambiente.

El juez reconoce el interés legítimo de la comunidad científica independiente que integra la Colectividad del Maíz y les permite monitorear los impactos de los transgénicos, incluyendo el glifosato, cosa que antes no se podía, pues eran las mismas empresas las que se monitoreaban a sí mismas.

 

 

 


Síguenos en redes sociales como @KENArevista: