Cuando mi sobrina la menor -hoy de 14 años- tenía entre cinco y seis años solía decirle a mi mamá y a mi hermana “no quiero comer animales muertos”. Eso era algo que yo llevaba pensando varios años de mi vida, esa parte de mi conciencia resonaba con aquellas palabras de la pequeña y yo me decía a mí misma: deberían dejarla decidir si no desea comerlos. En lugar de eso y dada la información, tradiciones culturalmente aceptadas y heredadas sobre la comida y el arraigado mito de que sólo la carne contiene proteína, ambas, mi madre y hermana, engañaban a la niña al momento de alimentarla, diciéndole que su comida no tenía animales o que el animal era un “pollo de mar”.
Moralmente a mí me hacía muchísimo ruido que la engañaran, llegaba hasta la molestia, sin embargo, uno sabe que los padres siempre darán a sus hijos aquello que ellos creen es lo bueno y mejor para comer.
¿Comer o no comer animales? Esa es la cuestión…
Recientemente a la dieta vegana y plant based se le ha dado mucha exposición, especialmente este 2019 ha sido de un boom de opciones del corte en restaurantes franquicia, centros comerciales, proliferación de nuevas marcas de sustitutos de carne, empresas cuyo principal giro son los productos animales e invierten en lo basado en plantas, famosos volviéndose veganos, atletas promoviendo la dieta, etcétera, etcétera.
Dada la bulla por esta práctica alimenticia, hay dos casos recientes que me han llamado mucho la atención por la controversia que han causado dentro de la agricultura industrial y sus miembros, quienes salen a “desmentir” y defender sus modus vivendi argumentando esencialmente dos cosas: que los spots son engañosos o absolutamente falsos, es decir, en ambos casos quienes se defienden recurren a señalar la “mentira” como móvil y principal contenido.
“¿Leche? ¡No gracias!”
Uno de estos casos fue el ocurrido en México cuando el actor Eugenio Derbez en asociación con la ONG pro animalista, Liberum, emitió el 14 de octubre pasado la campaña titulada “¿Leche? ¡No gracias!” para informar sobre las implicaciones ambientales y éticas que conlleva el consumo de leche de vaca, a la vez que invitaban a dejar de consumirla y sugieren el cambio hacia aquellas bebidas basadas en plantas.
El spot ha causado tanto descontento entre el gremio lechero, ganadero y sus adeptos, que el diputado federal Eduardo Ron Ramos, presidente de la comisión de ganadería, publicó en su Facebook un pronunciamiento contra el actor; le pidió “informarse y capacitarse antes de hablar” para no afectar a dicho gremio, y le exigió “no decir mentiras sobre un alimento tan noble como la leche”. Asimismo concluyó echándole en cara una “ambición económica para confundir al consumidor”, la cuál por cierto no deja clara. El mensaje del citado funcionario se centró en los calificativos hacia Derbez y no así en desmentir los impactos ambientales, ético-morales y a la salud que conlleva el consumo de este lácteo.
Por otro lado, en la plataforma de crowfunding change.org, existe una petición para retirar el controversial spot de todas las plataformas digitales, porque, según ellos, “difama al sector”.
Alternativa Tesco
Otro caso similar se dio en el Reino Unido con el spot producido por la cadena de supermercados Tesco, en donde presentan la historia de un padre y una hija; esta última le dice al primero “papá, ya no quiero comer animales”, por lo que el padre decide hacer un cambio en el platillo tradicional familiar y sustituir la salchicha animal por una vegetal. Este producto publicitario fue recibido negativamente por la National Farmers Union y su presidenta Minette Batters quien acusó a la cadena de tiendas de “demonizar” la carne y “eso crea problemas para los granjeros de carne de res.
Tesco por su parte ha respondido que “el anuncio no demoniza la carne en absoluto, solo establece la conexión de que la carne proviene de los animales”, además de reflejar “la vida como es actualmente”.
La discusión no termina ahí y pisa terrenos de debate sobre nutrición, salud y desinformación, por supuesto, cada lado defendiendo su postura.
La realidad este último anuncio me recordó esas palabritas de mi sobrina, se me quedaron grabadas, y es una escena real en muchos hogares, los niños aman a los animales, somos los adultos quienes hemos normalizado esas diferencias entre especies, somos nosotros de quienes aprenden y en todo caso, los dejan sin opciones.
Como he dicho, la comida y el alimento es una tema de elección basada en valores individuales y creencias íntimas, sin importan el lado en que se esté y lo que se defienda, hay que hacerlo bien informados y sin el afán de desacreditar lo que el otro dice porque a mí no me gusta o porque amenaza mis intereses. El que exista esa variedad de mensajes en el entorno digital es lo que da herramientas para hacer una elección informada y congruente con nuestras creencias. Cada quien decide.
#GoVegan
Fuentes:
Spot ¿Leche? ¡No gracias! https://www.youtube.com/watch?v=7o6zlCETc7U
Spot Tesco: youtube.com/watch?v=_3PW8BlNDl4
Tesco controversy: https://www.livekindly.co/watch-tescos-controversial-new-vegan-sausage-commercial/
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