Si sufres de indigestión frecuente, fuertes dolores de cabeza, problemas en las articulaciones, entre otros síntomas, presta atención a tu cuerpo, son las señales más usuales de la intolerancia al gluten.
Un día, en tu primera semana de trabajo, se te ocurrió tomarte una taza de café, porque había una señora que lo tomaba religiosamente para mantenerse activa todo el día. Basta de creer en rumores, ¡qué viva el café!